Una española.
Ramón es un preso que se fuga y se hace pasar por peregrino porque quiere ir a un pueblo donde su compañero Xavier escondió unas joyas. No le cuesta mucho hacerse con la indumentaria, al robársela a otro, y tiene la suerte de dar con un señor mayor del pueblo que anda buscando y que le conduce allí. Mientras tanto el Arcipreste de Compostela investiga la desaparición de peregrinos en un bosque.
La distribuidora no les pagó e incumplió el contrato así que Fernando Cortizo, el director y guionista, decidió colgarla íntegramente en YouTube.
En el reparto de doblaje tenemos las voces de Paul Naschy (Arcipreste), Jorge Sanz (Pablo), Manuel Manquiña (Salustiano), Luis Tosar (Xavier) y Geraldine Chaplin (Dorinda).
Paul Naschy murió en el 2009 y aún así ha aparecido en títulos que han salido posteriormente como "Los resucitados" (2017), la cual fue rodada en los años 90 o "El ojo de la Médusa" (2021), una película que estuvo desaparecida durante décadas. Aparte del que nos ocupa, obviamente, que sí fue la última en la que trabajó.
Está hecha en stop-motion y el realismo es lo primero que me ha sorprendido.
En el arranque de la película vemos al personaje que dobla Luis Tosar tratando de escapar de prisión. No he podido evitar pensar en "Celda 211" (2009).
El viejo conduce a Pablo por el camino erróneo para que termine en un pueblo, luego cambia la señal que marcaba hacia donde está Santiago de Compostela. Me ha recordado al principio de "Two Thousand Maniacs!" (1964).
El pueblo es un lugar tan tradicional que no permite a las parejas dormir juntas, ni siquiera si están casados. Y todos deben acudir a misa.
Por otra parte Ramón es tan ladrón que no puede evitar robarle el reloj a un señor durante la misa, por ejemplo.
Me gusta que hayan incluido a la Santa Compaña.
De todos los personajes el más creíble es el arcipreste. Se harta a comer y beber alcohol cada vez que tiene ocasión, ningunea a su acompañante para poder estar más cómodo y se cree intocable.
En un momento dado Ramón tiene una pesadilla en la que se adentra en una cámara del tesoro repleta de monedas de oro. Da a entender que los del pueblo son unos codiciosos que se dedican a matar y a robar a los que consiguen engañar para que pasen una noche allí. Al final descubrimos que el único codicioso es el arcipreste. De hecho los del pueblo ni siquiera roban el dinero que llevan en las carteras.
Tiene una escena que se desarrolla durante los créditos finales.
La única duda con la que me he quedado es si las intenciones de Xavier eran dejar a Ramón en el pueblo y huir con el "botín" a sabiendas que allí se dedicaban a sacrificar a la gente de fuera.
En todo caso me ha gustado, especialmente por la manera en la que termina el arcipreste.
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