La secuela.
Estamos en Estonia en el año 2007. Anna acaba de llegar a una clínica de alta seguridad, pretende usar el arte para ayudar a los pacientes. Leena es la paciente más peligrosa y precisamente es de quien se encargará. Es una mujer de 31 años con la apariencia de una niña de unos 10. Leena consigue escaparse tras matar a un guardia y se mete en el vehículo de Anna. Tras ello se hace pasar por una niña perdida llamada Esther y la envían a Connecticut, en EEUU.
Tras ver "Orphan" (2009) lo cierto es que no esperé que hicieran una secuela y menos tantos años más tarde.
De la primera sólo repite Isabelle Fuhrman (Esther / Leena) como la protagonista. Del resto del reparto destacan Julia Stiles (Tricia Albright), salió en varias películas de la serie "The Bourne Identity" (2002), Y Hiro Kanagawa (Detective Donnan), salió en las series "The Man in the High Castle", "iZombie" y "Altered Carbon".
No usaron ningún tipo de efecto digital. Todo es maquillaje, perspectiva forzada y dobles. En ese sentido el mayor reto fue conseguir que la protagonista pareciese que tiene 10 años, cuando la rodaron tenía unos 23.
Por lo que he leído algunos consideraron un agujero de guión que no explicasen en la primera película cómo hizo Esther para viajar desde Estonia a un orfanato de EEUU. Cuando la vi a mí no me lo pareció, de hecho dado que es alguien bastante inteligente no parece algo tan complicado. Es más, en esta película lo explican y resulta de lo más simple una vez huye de donde la tienen retenida.
Algunos diálogos del principio son en estonio, el cual no conozco pero por suerte es un idioma influenciado por el ruso. Por ejemplo Leena dice "идти" para hacer que otra reclusa se vuelva loca y para que se calme, se puede traducir como "ve".
Por supuesto vuelven a jugar con las cosas que no acaban de encajar, aunque dado que la niña hace 4 años que está desaparecida y que ha "cambiado mucho" no resulta demasiado sospechosa.
El policía es realmente pesado. Invierte más horas en investigar a la niña que en un caso de asesinato.
La primera mitad de la película no me ha parecido gran cosa, la verdad, pero de repente llega un girito argumental que no me esperaba y se pone interesante. Es curioso porque con la primera película me pasó algo similar.
Un consejo, así en general, nunca amenaces a una psicópata. Te va a salir mal la jugada, sí o sí.
Me encanta la escena en la que escucha "Maniac" de Michael Sembello.
Es una de las pocas películas en la que maltratar a una niña, hasta el punto de querer matarla, está perfectamente justificado.
Tampoco puede tener demasiados finales dado que es una precuela. Y efectivamente el final conecta con la primera película.
Es de esas películas que no necesitaban una secuela y que una precuela en realidad sólo nos cuenta un poco más de la historia de Esther. Dicho de otra manera no acabo de ver la necesidad, menos aún tras terminar de verla. Pero bueno, es lo que hay.
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