Dale y Brennan se convierten en hermanastros del día a la mañana. Ambos rondan los 40, están sin empleo y siguen viviendo con sus padres. Al principio se llevarán como el perro y el gato pero eventualmente encontrarán algo que les unirá.

Durante las entrevistas atentos a los cameos del director Adam McKay, el de Ken Jeong y el de Seth Rogen. Aparte Horatio Sanz es el cantante de la banda de la fiesta del final.
Es muy estúpida, en una palabra. Se nota mucho que Will Ferrell fue uno de los guionistas porque aunque la situación inicial se podría calificar de normal poco a poco va derivando en momentos absurdos, algunos no demasiado bien conectados.

Otra es el cambio radical que dan tras el divorcio. He de decir que me ha gustado que no hayan buscado las soluciones más obvias a las situaciones que se les van planteando pero en esta ocasión es un cambio demasiado raro, ¿de repente Brennan se convierte en un tipo superresponsable y Dale se pone a trabajar de cocinero? es absurdo como mínimo.
Luego están los momentos fuera de tono. Por ejemplo cuando vemos las pelotas de Brennan (bueno, son falsas) tocando la batería de Dale o cuando Alice se pone a mear en un urinario vertical de hombres.

La película de Steven Seagal que miran en un momento dado es "Above The Law" (1988). La espada de Brennan es una réplica de la de Duncan MacLeod de la serie de televisión "Highlander".
En fin, si queréis ver a esta pareja de orangutanes haciendo el imbécil sin parar es vuestra película. Por cierto tiene una escena extra durante los créditos finales y otra más al final.
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