Otoño 1957. Una noche Agustín huye de su casa dejando a su esposa embarazada de su hija Estrella. 8 años más tarde se trasladan a vivir a una casa en el norte de España a mitad camino del campo y la ciudad. Su padre, un republicano, abandonó a su abuelo, del bando nacional, tras una fuerte discusión.
Es una coproducción franco-española. Una de nuestras películas mejor valoradas por la crítica, de hecho forma parte de la colección Criterion.
El director Víctor Erice considera que es un proyecto inacabado. De los 81 días que tenía previstos de rodaje sólo llegaron a emplear 48. En su momento se creyó que fue por un tema de presupuesto, la realidad es que el productor creía que ya habían terminado de filmarla cuando se trasladaron de Francia a España.
Del reparto destacan Icíar Bollaíns (Estrella - 15 años), fue su debut en el cine, es más conocida por dirigir películas como "Te doy mis ojos" (2003). Lola Cardona (Julia), salió en "La venganza de Don Mendo" (1962). Y Rafaela Aparicio (Milagros), una todoterreno del cine español con un montón de títulos.
Esta película es un perfecto ejemplo de algo que sucede en algunos títulos que me resulta muy molesto: los cambios de volumen. Hay ratos en los que hablan susurrando y apenas se les oye, con lo cual tienes que subir el volumen, pero luego gritan o hay un sonido de un motor (o cualquier cosa) y has de bajarlo porque está demasiado alto. Son ganas de tocar los cojones.
Vemos a un zahorí en acción. Es un hombre que se dedicaba a buscar agua subterránea. Vimos a una mujer haciendo lo mismo en "The Thing That Couldn't Die" (1958).
En un momento dado la niña se queda mirando el cartel de una película titulada “Flor en la sombra”. Es ficticia. También vemos el de "Shadow of a Doubt" (1943) de Alfred Hitchcock.
Sí que es cierto que de la manera en la que termina podría seguir la historia. Pero en esta película es tan importante lo que muestran como lo que no muestran. Aparte su duración es de casi dos horas, lo cual quiere decir que o bien se habría extendido a las 3 o 4 o bien hubieran eliminado buena parte de la trama de la primera mitad, en todo caso el resultado hubiera sido peor.
Dicho de otra manera, accidentalmente crearon una película con una trama que se sostiene por sí misma y con un final abierto para la imaginación del espectador.
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