Un grupo de estudiantes de teatro son invitados a participar en una casa del terror en la que una de ellos vio unos asesinatos cuando era pequeña.

La película empieza con una niña entrando en una casa "encantada", donde en realidad viven unos niños sin hogar, y se va encontrando un cadáver detrás de otro sin mostrar el más mínimo interés en ellos, luego ve a una mujer meter las manos en el triturador de basura, saliendo sangre a borbotones, y se queda como si tal cosa, finalmente se asoma a una mirilla, ve un ojo, y se asusta. Si es que los niños de hoy en día están tan insensibilizados...

Es una de esas películas en las que hacen uso de equipos informáticos, ni siquiera me voy a molestar en analizar la jerigonza que suelta uno para describirlos porque el problema esta en la manera en la que el ordenador muestra como el fantasma ha tomado posesión del sistema con mensajes ENORMES mientras se ven unas letras al más puro estilo "The Matrix" (1999) mezcladas con vete-a-saber-qué.

Por cierto todo el rollo de los hologramas me ha recordado muchísimo a Star Trek, Jeffrey Combs ha salido en unos cuantos capítulos.
En la parte final parece que quieran dar a entender que la protagonista era uno de los niños, pero al principio de la película era alguien que jugaba con sus amigas y de repente decide entrar. Y el "segundo final" no ayuda lo más mínimo.
Es demasiado... fantasmal para mi gusto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario