Frenzy (2018)

No es un gran título.

Un grupo de amigos graban un vlog sobre sus viajes para poder financiarlos. Esta vez su plan es hacer una expedición subacuática pero el avión que les llevaba tiene un accidente y caen en aguas infestadas de tiburones.

Aunque las GoPro tuvieron mucha popularidad hace unos años (no sé hasta qué punto la siguen teniendo, la verdad) su uso en películas ha sido minoritario. Y la verdad es que me esperaba que su calidad fuese mucho mejor a estas alturas, claro que igual usaron una vieja para que se notase más el cambio de cámara profesional a la de aficionado.

Los ataques de los tiburones empiezan bastante temprano. Son poco claros porque suelen "manchar" el agua y procuran no mostrar demasiado a los tiburones cuando están comiendo. Aparte se me hace raro ver un grupo de 3 tiburones blancos atacando coordinadamente y en formación.

Mi primer problema con esta película es que meten flashbacks para introducir un poco más a los personajes. Pero lo hacen tan mal que para cuando lo hacen algunos de ellos ya han muerto y carecen de importancia. Además van desordenados sin necesidad alguna.

Resulta que los tiburones son tan estúpidos que prefieren morder restos flotando que a una de ellos cuando está sumergida. Pero nada más sale a la superficie van directos a por ella. Cero sentido.

Qué conveniente la balsa en la roca con la radio, un suplemento infinito de vendas, la botella de agua, las bengalas, la gasolina... esta chica tiene una suerte que no se lo cree.

En un momento dado aparecen dos tipos con una barca. Y se los comen los tiburones. Ni siquiera se esfuerzan en hacerlo interesante.

Los métodos usados para matar a los tiburones son... peculiares. De hecho "rociarlo con gasolina y prenderle fuego" es descartado por lo obvio, pero aún así funciona. Todo es cuestión de actitud. Y el cuchillo más pequeño del mundo resulta ser una pieza vital para sobrevivir al ataque de tres tiburones.

Es muy mala, en todos los sentidos. La protagonista es demasiado guay y todo le sale demasiado bien, bueno salvo cada vez que intenta salvar a alguien que falla estrepitosamente. Y los tiburones rugiendo son penosos.