Zeynep empieza a tener todo tipo de apariciones extrañas. Sus amigos también tienen visiones que empiezan cuando sus uñas se vuelven de color negro. Y deciden buscar ayuda para averiguar qué les está sucediendo y por qué.

En cualquier caso pasamos a otro formato diferente. Es un cine de terror más convencional que lo anterior, aunque sigue usando una fuerte edición de imagen. Aparte incorpora de nuevo CGI combinados con maquillajes de látex grotescos.

Aunque no sea de manera recurrente los gatos parecen formar parte de la saga de manera bastante discreta, aparecen en momentos puntuales aunque no sé hasta que punto el director pretende indicar su pertenencia al mal.

Siguen con lo de que lo que ve el protagonista y lo que sucede realmente es totalmente diferente. Personalmente me gusta que saquen fantasmas o espíritus malignos y no hagan como en la 3ª.

Hay uno que va con camisetas de Iron Maiden y Aerosmith... pero que escucha death metal.
Tal y como pensé no forma parte de la saga Dabbe, es simplemente una historia sobre unos Djinn. Pero bueno, es curiosa de ver y su final es sorprendente. Ahora sí pasemos a la cuarta parte.
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