Una mujer va corriendo por el bosque cuando ve una cabaña y llama pidiendo ayuda. Dentro hay tres chicas que la drogan y se comen sus intestinos tras desnudarse. Posteriormente tres jóvenes van al mismo bosque de acampada y pese a que se encuentran a un tipo que les advierte de la presencia de brujas y de que van a morir deciden hacerle caso omiso.
La productora es Gatorbladefilms (su web). Tienen títulos tan sugerentes como "Bigfoot Ate My Boyfriend" (2016), "Cannibal Claus" (2016), "Bikini Monsters" (2010) o "Die Die Delta Pi" (2013). No me importaría ver alguno de ellos en el futuro.En la escena con la que empieza la película se nota que usaron un dron para grabarla por los movimientos erráticos repentinos que hace la cámara, aparte que se posiciona en lugares un tanto complicados si hubiera sido una grúa o algo similar.
No desprende erotismo precisamente la escena de las tipas desnudas comiendo órganos ensangrentados.
Durante los créditos de inicio ponen símbolos satánicos acompañando los nombres del reparto y demás. Entre ellos está el sello de Baphomet, el cual podemos ver en la portada del disco "Welcome to hell" de Venom, por ejemplo. Lo interesante de este símbolo es que tiene una serie de letras en hebreo, más concretamente "לִ וְ יָ תָ ן" que forman la palabra Leviatán.
Para que suene algo de fondo usan música sin licencia. Como las que solemos oír en los videos de Youtube para evitar problemas de copyright.
Cuando no van desnudas las tipas se dedican a ir en bikini y pantalones cortos.Una de ellas está interpretada por Sushii Xhyvette Holder (Sukie). Se debió aburrir mucho porque a ratos se cambia los piercings de los pezones. Es la única de las tres con cierta experiencia en el mundo del cine.
Me encanta que las tipas digan "hay demasiada carne, mejor guardemos el resto para más tarde". Claro, con un cadáver al día tienen suficiente, aunque no se lo comen entero y necesitan que esté fresco, recién muerto. Son unas brujas caníbales responsables.
Cuando el tuerto le enseña las armas que tiene escondidas en medio de la maleza el pringao al que entrena suelta "Oh my god you voted for Trump". Me meo.
No me cuadraba una cosa del principio de la película, ¿quién perseguía a la chica?, por suerte lo resuelven en la parte final.
En esencia los "rituales satánicos" consisten en rebozarse en la sangre de la víctima estando completamente desnudas y restregarse las unas con las otras. Pero no es nada sexual per se. Terminan con una ducha en grupo. Al menos son limpias.
Por cierto, cuando se duchan es cuando más se nota que la sangre es falsa porque adquiere un color tirando a naranja. Es también la parte en la cámara más se recrea, de hecho ponen la escena a cámara lenta y todo.No podía faltar la escena de tiroteo. Pero es realmente ridícula, se dedican a disparar sin apuntar y a pelo descubierto (bueno, especialmente ellas que van en pelotas).
Tiene una escena extra en los créditos finales en la que descubrimos que una de las muertas sigue viva.
Es cutre con avaricia. A no ser que te gusten las chicas que se despelotan a la mínima y se embadurnen de sangre no sé qué otro atractivo puede tener. Aún así quiero ver más de esta productora.
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