Paco, Luís, José y Enrique se van a cazar conejos. Juan, el guarda les encuentra cuando ya están establecidos y se queda preparando la comida mientras hacen la primera batida. En realidad detrás de todo ello hay un asunto monetario y eso hace que poco a poco aumenten las tensiones entre ellos.
Dirigida por Carlos Saura, es también co-guionista. Conocido por "Cría cuervos" (1976) y "¡Ay, Carmela!" (1990).Enrique es el más joven, ha traído una cámara Polaroid para hacer fotografías y una pistola Luger.
En un momento dado se ponen a hablar cada uno individualmente mirando a cámara, pero no se están dirigiendo al espectador, hablan entre ellos.
Usan tanto escopetas de cartuchos como un fusil con balas. Me llama la atención como se carga este último, en la culata tiene un pequeño agujero por el que se ponen las balas.
Los conejos "apestados" es porque están infectados de misomatosis, en la película la nombran. La historia que cuentan de los conejos en Australia es cierta.El lugar de caza fue uno de los múltiples escenarios de la Guerra Civil.
Están en pleno sol y uno de ellos bebe algún tipo de alcohol. Es lo peor que puedes beber en caso de sed.
No sólo emplean sus armas, también a una perra para que recoja las piezas y remate a los conejos en caso necesario. Todo lo que se ve es real, aquí no hay efectos especiales.
El libro que lee Luís es "El planeta negro" de David Duncan. El título original es "Dark dominion" y fue publicado en 1954.No me esperaba un final tan brutal. Alguna muerte quizás, pero esto me ha sorprendido de veras.
Es una película claustrofóbica a pesar de que prácticamente toda la acción transcurre en un campo abierto. La cámara juega un factor fundamental en ello, con primeros planos casi angustiantes y reforzada por los pensamientos de da uno.
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