Volvamos al instituto de las superheroínas.
Hawkgirl ha encontrado un libro demasiado poderoso y las chicas deciden crear un dispositivo donde poder guardarlo de manera segura. Pero cuando le piden a Raven que use su magia para protegerla los poderes de Batgirl y Supergirl son intercambiados.
Por tercer año consecutivo han sacado una película sobre la serie que empezó a emitirse en el 2015. Hasta el momento me han gustado porque tampoco es como para tomárselas demasiado en serio y juegan bastante bien con los personajes fuera de sus lugares habituales.
Mera tiene un caballito de mar llamado Storm, en los cómics pertenecía a Aquaman. Junto a ella aparece su hermana Siren, una de las novedades de esta película.
El libro que usa Siren al principio se parece al Necronomicon de "The Evil Dead" (1981).
Raven hace aparición por primera vez también. Es el tercer personaje de Tara Strong (tras Harley Quinn y Poison Ivy).
Aquaman es la última novedad, aunque tras enfrentarse a Siren desaparece (lo deja durmiendo un sueño eterno, tal cual) y no le volvemos a ver hasta el final.
La escena final de Gorilla Grodd guardando la caja con el libro recrea un poco la de "Raiders of the Lost Ark" (1981) y la caja de la alianza.
Creo que estiran demasiado un argumento que no da demasiado de sí, se dedican a mostrar el lado más malo de Siren incluso cuando no es necesario y es todo el rato lo mismo. Apenas hay variedad, porque básicamente los malos son los monstruos de la fosa y aunque sean un montón son idénticos entre sí.
Suele suceder en este tipo de películas que llega un punto en el que se estancan. Lo cual es muy curioso porque la DC tiene héroes y villanos para aburrir. Igual si hubieran puesto a un segundo villano para contrastar...
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