Tras ser expulsado del ejército Nathaniel Burke se pone a fabricar armas experimentales cuyos planos ha robado. Por su parte John Henry Irons, un ex-compañero que le conoce muy bien, decide oponérsele.

La primera opción del director para protagonizarla era Wesley Snipes pero la Warner pensó que sería mejor Shaq porque venderían más juguetes. Buf.
Uno de los problemas que tuvieron es que no encontraron un doble lo bastante grande para Shaquille así que tuvo que hacer todas las escenas de acción.
Una de esas películas en las que aparecen los Minidiscs de Sony.

Burke decide matar a un chaval quien logró escapar por los pelos tras el primer robo. Sin embargo no hace absolutamente nada en contra de Irons, el que conoce las armas y que puede detenerle.
En un momento dado un policía llama "Sir Lancelot" a Steel. No podría estar más acertado, lo que lleva parece la típica armadura medieval.
Está muy bien que la tal Sparks esté viendo la película para ayudar a Steel diciéndole por donde viene la policía o si le atacan por la espalda.

El arma que lleva Steel es un martillo. Pero claro, eso sería demasiado simple así que es capaz de lanzar rayos láser, de convertirse en un potente imán y en un arma sónica. Aparte de ser un martillo de acero, claro.
Total que el malo decide hacer una demostración de sus armas y decide llevarse a Steel, pero le deja con su armadura puesta porque es gilipollas.
Es una película llena de momentos que no hay por donde cogerlos. Me alegro de no haberla visto hasta ahora.
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