También conocida como "The Haunting on Long Island: The Amityville Murders".
Estamos en Amityville en 1974. Butch y Dawn son hermanos gemelos y celebran sus cumpleaños. Él quiere vengarse de los abusos de su padre y por accidente mientras juegan con sus amigos invocan a unos fantasmas que atormentarán a la familia y más concretamente a Butch.
Por algún motivo creí que tenía controlados los títulos de Amityville pero hace unas semanas descubrí un montón que no tenía ni idea que existiesen. Concretamente son "Amityville: Vanishing Point" (2016), "The Amityville Legacy" (2016), "Amityville: No Escape" (2016), "Amityville: Evil Never Dies" (2017), "Amityville Exorcism" (2017), "Amityville Prison" (2017) y "Amityville: Mt. Misery Road" (2018), además de la que nos ocupa. En un futuro (lejano) aparecerán en el blog.
Dicho lo cual, tampoco es que sea muy difícil hacer una película de Amityville pues sólo ha de transcurrir en una casa y ha de morir gente en ella de manera inexplicable. Y encima algunas de las secuelas ni siquiera siguen esa simple idea.
La primera peculiaridad de esta película son las apariciones de Burt Young (Brigante) y Diane Franklin (Louise DeFeo) quienes salieron en "Amityville II: The Possession" (1982) interpretando otros personajes.
Como estamos en 2018 y cuesta mucho hacer que los espectadores se imaginen a unos fantasmas deciden darles una forma para que sean fácilmente identificables. Más concretamente una sombra con la silueta de un hombre con dos lucecitas en los ojos. Qué miedo, ¿eh?.
En el apartado positivo tenemos que la acción está situada en los años 70. Eso quiere decir que las drogas duras eran "normales" y tener una escopeta en casa era sólo "peligroso".
En un momento dado el padre está a punto de ser asesinado por Butch (la escopeta que nunca ha fallado de repente no funciona bien). He de decir que me ha decepcionado mucho esa escena.
Otra escena estúpida es la de Dawn conduciendo mientras llueve sin poner los limpiaparabrisas. Y no son dos gotas precisamente.
La mayor parte de la película consiste en que los personajes (principalmente Butch) oyen voces, ven fantasmas y se van volviendo cada vez más locos. En realidad eso está bastante bien porque a pesar de lo cutre de algunos efectos al menos no se hace aburrida en ningún momento.
Mi parte favorita es cuando Butch está en el coche con una chica y ella le hace una mamada y de repente la cara de la chica cambia por la de su hermana y la echa a patadas. Me ha hecho bastante gracia.
Pero vamos, está basada en los asesinatos originales. De hecho termina con imágenes reales de cuando llegó la policía y como detuvieron a Butch y algunas fotos de la familia. También aparece brevemente la pareja que protagoniza la primera película. En general no me ha parecido tan mal, al menos no comparada con la chorrocientas secuelas. Es lo que tiene hacer una película mediocre en medio de auténticas basuras.
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