Llegó la hora de hablar de ella.
Arthur es un payaso quien vive con su madre en Gotham City. Su trabajo va de mal en peor y su sueño es hacer feliz a la gente por lo que está tratando de terminar un monólogo gracioso. Pero ni siquiera eso se le da bien. Encima los servicios sociales sufren recortes y ya no puede adquirir las pastillas que le mantienen medio cuerdo.
El primer error que puedes cometer en esta película es tratar de comparar al protagonista con las anteriores caracterizaciones del Joker. Básicamente porque ésta es la primera vez en la que la historia gira única y exclusivamente en torno a él, no es sólo una reintrepetación del personaje, aquí se profundiza mucho más en él que en cualquier serie o película de Batman en la que haga aparición.
La idea de los creadores Todd Phillips y Scott Silver era hacerlo lo más realista posible. Por eso descartaron la idea clásica de que fuese desfigurado al caer en un tanque de ácido.
Dicho lo cual, ¿qué nos espera?. Pues el retrato de un sociópata de manual con alucinaciones transitorias que termina convirtiéndose en uno de los villanos de Batman, cosa que la película deja en suspenso al final, aunque tengo la impresión de que no veremos una continuación (espero equivocarme).
Joaquin Phoenix (Arthur Fleck) nos ofrece un personaje completo. La idea con la extraña risa que hace es precisamente para que la gente no se identifique con él. Para lograrla estudió vídeos de gente que sufría trastornos patológicos basados en la risa.
Aparte perdió 23 kilos y medio, se nota muchísimo. Su maquillaje de payaso está basado en el de John Wayne Gacy, el asesino en serie. Además el club donde hace su monólogo se llama Pogo, el apodo de Gacy.
La película hace pequeños homenajes a los Joker más famosos, como el traje que lleva (Cesar Romero) o la escena en el coche de policía (Heath Ledger), o la del callejón y los Wayne (Jack Nicholson). Son sutiles y son correctos.
Otro puntal en la historia son las revueltas en las calles que nacen a partir de una situación insostenible tras una huelga de basureros. Recuerda demasiado a las manifestaciones que han venido sucediendo estos últimos años usando símbolos como las máscaras de "V for Vendetta" (2005). Es obvio que se basaron en ellas, pero incluso eso tiene un desarrollo lógico (aunque bastante básico).
La sorpresa en el reparto es Robert De Niro (Murray Franklin) quien apenas formó parte de la promoción (lo cual me parece un gran acierto).
Apenas hay CGI en toda la película. De hecho el más destacable aparece en la escena en la que el protagonista va a Arkham (y no tengo muy claro hasta qué punto es necesario). También aparecen unas pocas ratas gigantes, pero hay que fijarse mucho para verlas.
Hay referencias bastante claras a "Taxi Driver" (1976) y "The King of Comedy" (1982). Estéticamente hablando recuerda a "The Warriors" (1976) y "Death Wish" (1974).
No está establecido en la película pero la acción transcurre en Julio de 1981. Podemos inferirlo por ejemplo a partir de la escena de los Wayne saliendo del cine, las películas que proyectan son "Blow Out" (1981) y "Zorro: The Gay Blade" (1981), es cuando fueron estrenadas.
Aparece también el título la película "Ace in the Hole". Es una referencia tanto al Joker de Heath Ledger como a la planta de química ACE de "Batman" (1989).
Me ha gustado y mucho. No me voy a poner en plan "oh, deberían darle el Oscar" porque creo que los Oscars han perdido tantísimo que carece de sentido siquiera pensar en ellos como un baremo. De hecho casi prefiero que no le den nada, ya tiene bastante reconocimiento por la gente que la ha visto y está hablando de ella (hace una semana que la estrenaron y aún sigue la cosa).
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