A ver qué es esto.
Unos veteranos de guerra se disponen a ir a un club de striptease cuando de repente entra una chica en su bar perseguida por dos tipos con intención de matarla y deciden intervenir.
Me sorprendió no haber visto este título en su momento y el otro día me crucé con él de nuevo y no pude evitar apuntármelo.
Por cierto V.F.W. son las siglas de “Veterans of Foreign Wars”, es algo que se usa en la realidad.
Aunque más concretamente se refiere a los centros dedicados a dichos veteranos para acelerar su rehabilitación, ayudar a sus viudas y huérfanos y ayudar a los impedidos.
En la película el V.F.W. 2494 es el nombre de un bar de viejos veteranos que se dedican a contar sus batallitas y al que llaman hogar.
Especialmente por su reparto que tiene nombres como Stephen Lang (Fred Parras), impaciente me tiene esperando la secuela de “Don’t Breathe” (2016). William Sadler (Walter Reed), a quien veré dentro de poco retomando su papel más conocido en “Bill & Ted Face the Music” (2020). Fred Williamson (Abe Hawkins), conocido por la trilogía “Boss Nigger” (1974) . Martin Kove (Lou Clayton), conocido por “The Karate Kid” (1984) y “Cobra Kai”. Y George Wendt (Thomas Zabrinski), conocido por “Cheers”.
Por cierto, se trata de otra película de Fangoria.
Me ha hecho mucha gracia volver a ver a George Wendt bebiendo cerveza en una barra de un bar.
Parece un lugar donde la vida humana no tiene ningún valor. En los primeros minutos matan a un par sin miramientos.
Creo que pocos actores con una cierta edad (aparente) dan el pego como tipos duros mejor que Stephen Lang hoy en día. Para que os hagáis una idea, su arma de elección es un hacha y mata más con ella que si llevase una pistola.
No son zombies pero casi. Concretamente son gente enganchada a una nueva droga que los vuelve más imbéciles de lo normal, descerebrados sería la mejor palabra para definirlos.
Podría parecer poca cosa en apariencia pero cuando vemos a los veteranos armarse y preparar todo tipo de sistemas de defensa la cosa se pone muy interesante.
El aspecto más negativo que le veo es que prácticamente toda la acción transcurre con una luz tenue (de hecho dos, una azul y una roja). Definitivamente ayuda a la hora de camuflar los efectos especiales de baja calidad (los muñecos y demás) pero le hace un flaco favor en el aspecto visual.
Tengo la impresión de que todo se solucionaría si el joven soldado saliese y le pegase un tiro (o varios) al jefe de los malos. No parece tan difícil acercarse a él y desde luego no es que vayan demasiado armados (palos y hierros, esencialmente). Desde luego a los masillas sería fácil reducirlos y los “mini jefes” no harían una mierda sin su jefe.
El gore es abundante, de hecho por un momento parecía que iban a recrear la escena del cortacésped de “Braindead” (1992). Pero como digo la sangre apenas se ve.
Me encanta como pasan de una noche cerrada a un amanecer de forma repentina. Me ha recordado a “The Return of the Living Dead” (1985).
Pero vamos, es una película genial. Me hubiese gustado más si las cosas se vieran un poco mejor, pero bueno, como tampoco espero demasiado de las películas actuales no ha sido una gran problema.
Esta la quiero ver.
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