No podía dejar pasar un título tan peculiar.
Un vuelo a Vietnam con un piloto borracho y unos pasajeros de lo más variopintos. Un cura lleva el cadáver de un hombre que estaba poseído por un demonio y durante el vuelo escapa y empieza a poseer uno a uno a los pasajeros.
En el reparto tenemos a Bai Ling (Amanda), un nombre que quizás no os suene pero yo la recuerdo porque iba a salir en “Star Wars: Episode III - Revenge of the Sith” (2005) pero borraron su personaje de la versión final porque la actriz decidió posar desnuda para una revista. Tal cual. Ha salido en títulos como “Crank: High Voltage” (2009) o “The Crow” (1994).
Aunque el nombre más llamativo es el de Lance Henriksen (Capitán Houdee), un actor que debería empezar a seleccionar mejor sus papeles, creo yo. Hace poco le vi en “Excessive Force” (1993).
También aparecen Bill Moseley (Garvan), conocido por “The Texas Chainsaw Massacre 2” (1986), “Night of the living dead” (1990) y “House of a 1000 Corpses” (2003). Y Kevin J. O’Connor (Buzz), conocido por “The Mummy” (1999), “Depp Rising” (1998) y “Van Helsing” (2004).
La primera escena de la película trata de recrear le póster de “The Exorcist” (1973). Quiero pensar que es un homenaje.
Empiezo a pensar que no es una película para tomársela demasiado en serio, lo cual es bueno.
Está cargada de escenas que a priori deberían ser graciosas pero es un humor bastante simple y, salvo alguna cosa puntual, gracia lo que se dice gracia no hacen.
La vietnamita que quiere hacerse un cambio de sexo es uno de esos “chistes” que personalmente no acabo de pillar. Supongo que es porque no es tailandesa.
Entre los pasajeros tenemos un tipo musculoso, una embarazada, una mujer con su hijo (un enano malhablado), una mujer que va a rejuvenecerse la vagina, dos monjas, un rabino, un mudo, una pareja que está en diferentes asientos (ella junto a un señor que duerme, él junto a una tía buena), un terrorista, un monje budista que bebe té de cannabis, una señora mayor que va con un perro muerto en su bolso… en fin, de todo.
Para pasar el rato está bien, pero no os esperéis gran cosa. Te tiene que pillar de muy buen humor para parecerte aunque sea un poco graciosa, o igual no es mi estilo de humor.
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