Los habitantes de una región francesa se están convirtiendo en una especie de zombies asesinos. Élisabeth se verá metida en medio de todo el embrollo cuando se dirigía a visitar a su novio.
Destaca la aparición de la actriz porno Brigitte Lahaye (mujer rubia). Además hace un striptease integral durante el cual hacía tanto frío que no pudo articular palabra.
La BSO es música electrónica, lo cual es sorprendente en una película de los años 70. Aunque pecan de usar más bien poca música durante muchas escenas.
De hecho el principal problema de esta película es la parsimonia con la que se toman todo. Van lentamente caminando por en medio del monte, se toman mucho tiempo mostrando primeros planos de los zombis (o infectados), también largos ratos en los que no sucede nada en concreto. No se hace excesivamente pesada pero la falta de presteza es un problema.
La verdad es que me ha recordado a algunos títulos de inferior calidad, los cuales dudo que se hayan fijado en esta película en concreto.
Me han gustado los maquillajes de los zombies, son muy variados y en realidad no creo que sea la mejor palabra para definirlos. Son una especie de infectados, algunos tienen total control sobre su cuerpo pero otros se mueven como los típicos zombies. Y no matan por comerse un cerebro, lo hacen porque quieren matar.
En definitiva, una película diferente. El final es quizás lo peor porque no le dan un remate a la historia, pero bueno, tampoco se le puede exigir demasiado a un título así.
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