Aquí la titulamos "La barba rebelde".
Un hombre se dispone a afeitarse cuando decide probar la espuma de afeitar lo cual provoca que tenga alucinaciones en su espejo en forma de caras grotescas. Finalmente rompe el espejo con un martillo.
Dirigida por Segundo de Chomón, el autor español más prolífico de la primera época muda. He comentado ya alguna de sus obras.
Es de apenas un par de minutos de duración.
La razón por la que la he buscado para verla es que se trata de una película que en su momento causó bastante sensación. Aunque hoy en día es pura comedia las caras que van apareciendo provocaron pesadillas a más de uno en su momento.
Evidentemente son personas maquilladas, de hecho creo que no es el tipo que se afeita. Entre los maquillajes tenemos pelucas estrafalarias, narices enormes y partes de máscara. Eso unido a las muecas que hacen que no son pocas.
Las imágenes se van alternando entre las del hombre que se afeita y las caras de un tamaño considerable. El "truco" es un montaje bastante simple, cortan la escena imagen en un momento preciso y retoman la acción con el actor en la misma posición reemplazando el espejo por una de las cabezas y luego de vuelta al espejo, así unas 6 veces. La mejor de todas es cuando rompe el espejo, el cambio sucede en el último momento justo antes de golpearlo.
De hecho yo lo habría hecho en dos tomas. El actor se aprende una rutina frente al espejo y la hace dos veces, la primera con el espejo y la segunda con las caras. Con unos cortes dados en los momentos adecuados quedaría exactamente igual que en el corto.
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