La versión porno de "The Texas Chain Saw Massacre" (1974).
Un grupo de jóvenes se han perdido y deciden pedir ayuda a un autoestopista quien les saca un cuchillo y mata a dos de ellos. El resto consigue huir pero termina en casa de unos locos caníbales que los van matando uno a uno.
Dirigida y escrita por Rob Rotten, el mismo que nos trajo títulos como "Porn of the Dead" (2006) (que igual va siendo hora de verla, a ver si me acuerdo) y "Swallow My Children" (2007) (no tengo ni idea de qué va pero el título es curioso).
Fue prohibida en el Reino Unido (cómo no) porque muestra una cantidad significativa de violencia erótica y por una escena de sexo en el que queda implícito que los que lo practican son hermanos.
La BSO corre a cargo de un grupo llamado Straight 8's.
La primera escena porno sucede prácticamente nada más empezar. Seguidamente pasamos a la primera escena sangrienta. Ésta es la interesante pues aunque no es demasiado explícita al menos el maquillaje de las heridas y demás está muy logrado.
Recrean en cierta manera la escena en la que Leatherface coge a una por sorpresa tras abrir de repente una puerta. La diferencia principal es que la puerta está en un lateral. Bueno y que seguidamente no la cuelga de un gancho sino que la ata.
Ya es gracioso que junto a la chica atada se vea un teléfono con una pegatina que pone Sheriff y su número.
Salen dos chicas que representan que son niñas (es mucho suponer en realidad), una de ellas recuerda a la de "Leatherface: Texas Chainsaw Massacre III" (1990).
Luego vemos a Leatherface matando a una chica usando un vibrador/taladro dando así sentido al título. Eso ya lo tenemos.
Las escenas de la familia comiendo vísceras y demás no están mal. Ponen un cadáver sobre una mesa y le van arrancando partes chorreosas de sangre a las que les van dando bocados.
Como en "The Texas Chainsaw Massacre 2" (1986) Leatherface se enamora de una chica y ésta le clava un cuchillo en la pierna para poder huir.
La película termina con un policía interrogando a la única superviviente quien va dando todo tipo de detalles sobre lo que le ha sucedido. Para ello emplean muchos flashbacks (que son escenas de la propia película). Con lo cual ganan fácilmente 15 minutos más de película sin contar nada nuevo. Casi hubiera preferido una escena porno más aunque no tuviera ningún sentido (como si las otras lo tuvieran...).
Con las parodias porno nunca sé que esperarme, algunas son muy cachondas otras siguen muy bien la película original y otras son muy muy malas. Ésta está bien, tiene alguna escena decente y se acerca lo suficiente a la película que parodia. Tampoco se puede pedir más.
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