La empresa Ryan-Lathrop está recreando el proyecto UniSol usando un ordenador llamado S.E.T.H. pero los militares no ven la necesidad del programa y pretenden desmontarlo. S.E.T.H. se entera y decide activar a todos los operativos por su cuenta.

Sólo repite Van Damme de la primera película. Qué chorprecha.
De las novedades del reparto destaca Bill Goldberg (Romeo), conocido por ser un luchador profesional de la WCW. Originalmente su papel iba a ser para otro luchador, Steve Austin de la WWE.
También aparece Xander Berkeley (Dr.Dylan Cotner), ha salido en títulos como "Gattaca" (1997), "Air Force One" (1997) o "Terminator 2: Judgment Day" (1991).

Aparte de el hipermusculado Godlberg también hay una chica entre los nuevos UniSols. En realidad eso ya lo vimos en la anterior película.
Sigue normas no escritas como que los guardias de seguridad están hechos para morir vilmente o que el hacer de turno es un tipo que come gominolas, bebe Coca-Cola y tiene el pelo azul (aparte de un serio problema mental).
Vamos a quedarnos quietos en este sitio hasta que el soldado hiperanabolizado atraviese la pared y entonces corremos a escondernos. Toda esa escena es estúpida, después S.E.T.H. impide que Romeo dispare a Luc pero sólo durante unos segundos.

La hija necesita una operación urgentemente pero no se la realizan porque su padre (que está en paradero desconocido) debe autorizarla. Esta gente es imbécil.
Me empieza a doler la cabeza viendo esta película. Hacía tiempo que no me pasaba y es que son demasiadas estupideces juntas. TODAS las frases de Goldberg son un gran ejemplo de ello.

Al igual que en la primera película Luc acaba con una periodista mientras los UniSols intentan capturarle. Pero en comparación la otra es una obra de arte.
Las siguientes secuelas decidieron ignorar por completo esta película así que igual sale algo bueno de todo esto al final. Pero antes una pequeña visita a The Asylum.
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