Un grupo llamado The Tritonz va a pasar una temporada en Canadá en una casa solitaria en el campo para poder ensayar y crear nuevos temas. Pero al poco de llegar son atacados por unos seres extraños.
El título que le pusimos aquí es la traducción del original: "The Edge of Hell". Además tuvo como un título alternativo "Arch Angel".Lo primero interesante es que se trata de una película canadiense. Con lo cual no puedo esperarme gran cosa de ella.
Y así es, en los primeros minutos oímos a una especie de monstruo demoníaco pero cuando aparece en realidad es un esqueleto muy mal hecho.
Es otra de las películas que trató de explotar el tema grupo de metal+terror. En el blog ya han aparecido algunos títulos de este subgénero como "Rocktober Blood" (1984), "Hard Rock Zombies" (1985) y "Black Roses" (1988).
Cada vez que ensayan se visten como si estuvieran grabando un videoclip, incluso ellas se pintan como si estuvieran en un concierto. Lo cual no tiene ningún sentido porque encima están en un granero.
Durante su primera actuación aparece un bichito diminuto con un solo ojo (parece una babosa) y se pone a vomitar en un vaso. Tampoco lo hacen tan mal, en mi opinión.No hay un monstruo per se, es más bien que poco a poco los monstruos van poseyendo a todos y cuando les parece bien se transforman y capturan a otra persona. Además cada transformación es un monstruo diferente.
En la segunda "actuación" una de las chicas está al teclado. No sabría dar una razón por la que no estuvo en la primera. Igual no le apetecía.
Se ven algunas tetas pero son muy de pasada y, de hecho, en alguna de esas escenas vemos como la chica se tapa inmediatamente.
Las muertes (bueno, las transformaciones) suceden siempre fuera de cámara con lo cual no sabemos exactamente qué les sucede. Eso sí son abundantes.
Aparecen trozos de numerosas canciones a lo largo de la película, fueron compuestas adrede. El intérprete es el cantante de un grupo canadiense llamado Thor (un tal Jon Mikl Thor, el protagonista de la película).En la parte final vemos al protagonista autodeclarlarse un arcángel y se queda medio en pelotas para luchar con el bicho malo de turno. Es una pelea tan ridícula, pero vamos si conseguís aguantar la hora y pico que la precede merece la pena.
Quiero pensar que el tono es un poco cómico, me cuesta muchísimo verlo pero es la mejor manera de pasar este mal trago. Lo único destacable es la música, aunque me hubiera gustado más si no cortasen algunas de las canciones.
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