Una película un tanto diferente.
Estamos en el año 1951, un guionista de Hollywood llamado Peter Appleton tiene un accidente de coche y pierde la memoria. Se encuentra en un pequeño pueblo estadounidense llamado Lawson donde le acogen como si fuera uno más de ellos, más aún cuando uno de los habitantes cree que se trata de su hijo desaparecido en la Segunda Guerra Mundial.
Jim Carrey ha tenido algunos altibajos en su carrera cinematográfica, aunque yo no estoy demasiado de acuerdo con las bajas valoraciones de algunas de sus películas. De hecho con el paso del tiempo he cambiado bastante de opinión sobre ellas por diversos motivos, casi siempre a mejor.
Esta sería un gran ejemplo de ello. En su día no me pareció nada especial, aunque quizás fuera porque me esperaba una comedia más estilo las que había hecho en los años 90. Sin embargo la segunda vez que la vi me di cuenta del periodo en el que transcurría y le di más importancia al hecho por el que es buscado el protagonista.
Sin entrar en demasiados detalles se trata de la famosa "caza de brujas" que hubo en Hollywood en los años 50 instigada por el senador Joseph McCarthy. En ella muchos artistas fueron acusados de ser comunistas, algo que en aquel momento se consideraba como un enemigo del estado (curiosamente para algunos no ha cambiado demasiado eso).
En la primera escena las voces de los ejecutivos son en realidad las de Garry Marshall, Paul Mazursky, Sydney Pollack, Carl Reiner y Rob Reiner.
La película-dentro-de-la-película se titula "Sand Pirates of the Sahara" y uno de los intérpretes es Ramón Jamón (me sorprende que le hayan puesto los acentos). En la primera escena que se ve de ella aparece Khalid sosteniendo el ídolo dorado del principio de "Raiders of the Lost Ark" (1981).
En dichas secuencias atentos a los cameos de Bruce Campbell (Roland el intrépido explorador), Cliff Curtis (El malvado pero guapo príncipe Khalid) y Michael Sloane (El viejo pero agradable profesor Meredith). Y justo antes de empezar la película por primera vez oímos la voz de Earl Boen dando el boletín informativo.
La parte en la que el protagonista se entera de que es una víctima más de dicha caza es brutal. Básicamente van a por él porque cuando iba al instituto estuvo en un club comunista, cosa que él ignoraba porque sólo iba allí por una chica. Esencialmente eso le jode la carrera y la vida.
El bar en el que se emborracha al principio se llama "Coco Bongo", es el mismo al que va el protagonista de "The Mask" (1994), interpretado también por Jim Carrey.
En el reparto destacan también los nombres de Martin Landau (Harry Trimble), conocido por "Ed Wood" (1994), salió también en "North by Northwest" (1959). Y Brian Howe (Carl Leffert), salió en "The Pursuit of Happyness" (2006).
Fue la última película en la que apareció James Whitmore (Stan Keller), aunque salió en algunas series de televisión posteriormente.
La primera película que se ve proyectada en el Majestic es "The Big Parade" (1925), es la que mira Emmet con el perro. La segunda es "The day the earth stood still" (1951), concretamente el día de la reapertura.
La mejor escena es cuando el protagonista recuerda quien es al ver proyectada la última película que hizo.
Y la parte más estúpida es la del tipo que decide demonizarlo hasta el extremo diciendo cosas en plan "espero no verle en la portada del Pravda mañana por la mañana tratándole como si fuese un héroe". Claro, un espía comunista que se hace pasar por guionista de segunda en Hollywood es todo un héroe al regresar a Rusia, muy lógico todo.
Matt Damon hace un pequeño cameo como la voz a Luke Trimble. Se oye en la parte final cuando el protagonista lee la carta antes de presentarse a la vista.
En fin, es una película muy emotiva con un toque muy estadounidense como es el discursito que suelta el protagonista frente al comité que le acusa de ser comunista. Y aún así la considero una de las mejores del actor de las que se alejan de su faceta como cómico.
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