El regreso de un peligroso criminal hace que el Sherif local, quien estaba a punto de retirarse, trate de reunir a un grupo de hombres para poder enfrentarse a él, pero el pueblo está lleno de gente que o bien apoya al criminal, son unos inútiles o simplemente no le sirven.

Lee Van Cleef no tiene ninguna línea de diálogo. Originalmente iba a ser Harvey Pell pero el productor Stanlet Kramer le dijo que su nariz le hacía tener un aspecto de villano y que si se la operaba le daría el papel, el se negó y terminó haciendo un personaje más pequeño.
Cuando un tren a vapor saca humo negro de las ruedas es señal de que los frenos están fallando. El director Fred Zinnemann y el cámara que estaba con él ignoraban esto y se salvaron de milagro. La locomotora se llevó por delante la cámara pero por suerte el negativo pudo ser salvado y es el que aparece en la película.

La escena de la iglesia en la que Kane intenta pedir ayuda fue parodiada en "Blazing Saddles" (1974).
La película transcurre casi a tiempo real, empieza a las 10:35 de la mañana y termina a las 12:15 (se ven varios relojes que lo indican), aunque la duración es de 80 minutos, osea le faltan unos 20. La discrepancia con la duración es porque fue re-editada.
La definen como la película del oeste que gusta a los que no suelen ver este tipo de cine. Creo que es porque sigue una estructura bastante teatral.

El tiroteo final es bastante intenso, los malos se confían demasiado y si el sherif hubiera tenido áunque sea un sólo ayudante hubiera terminado la cosa mucho más rápidamente.
Me ha gustado la simplicidad de la historia y como al ser continua no hay errores de continuidad ni agujeros de guión. Los que le apoyan no quieren/pueden ayudarle, los que no pasan de él, y ya está, eso son 3/4 de la historia, el resto es la recién esposa tratando de comprender por qué se quiere quedar y el tiroteo final. A veces no se necesita mucho más.
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