Estamos en México. Derek Bliss no tiene nada mejor que hacer en la vida así que se dedica a cazar vampiros a cambio de dividendos. Le piden formar parte de un equipo para cazar vampiros, pero a él no acaba de gustarle la idea, pero el dinero es motivo suficiente. El problema es que los tipos con los que tenía previsto montar un equipo aparecen muertos antes de encontrarse con ellos. De repente se encuentra con una chica que ha sido infectada pero consigue mantenerlo a raya.
Creo que vi las dos secuelas hace ya tiempo y no me dejaron demasiado buen sabor de boca. Dicho lo cual, la primera es una gran película con lo cual tampoco me sorprendería que fuese así.Escrita y dirigida por Tommy Lee Wallace quien hace un cameo como el señor asustado. Suyas son "Halloween III: Season of the Witch" (1982) y "Fright Night Part 2" (1988).
John Carpenter es el productor ejecutivo, eso explica que continúe la trama de la primera película de forma coherente.
En el reparto tenemos a Jon Bon Jovi (Derek Bliss), hace poco le vi en "U-571" (2000). A un jovencito Diego Luna (Sancho), conocido por "Rogue One" (2016). Y a Darius McCrary (Ray Collins), conocido por la serie "Family Matters".
Originalmente tenían pensado que Tim Guinee retomase el papel de cura. Eso sí hubiera sido interesante. En vista de que no pudieron se cargan al personaje al principio, aunque no explican cómo muere.
Las armas dentro de la caja de la guitarra son un guiño a "Desperado" (1995).En el arranque de la película vemos a un tipo amenazando a una prostituta mexicana, es una referencia a la leyenda (bastante real) del asesino de mujeres (o quizás fueron más de uno).
La vampira jefa tiene los ojos morados. Son unas lentillas que a veces se le desplazan un poco y se notan mucho.
De repente una tipa ha dado con una droga experimental que hace que no se convierta del todo en vampira.
La trama gira en torno a la cruz negra de nuevo. Lo de que con un ritual usándola los vampiros podrán caminar bajo el sol y tal... pero en realidad no hace falta porque hay una droga que hace el mismo efecto de manera temporal.
Total que el grupo lo forman Bon Jovi, el hijo mayor de los Winslow, un crío mexicano de 16 años, una vampira que sí camina bajo el sol y un cura inexperto. ¿Qué podría salir mal?.Tratan de recrear cosas de la primera película como el miembro del equipo al que muerde un vampiro y no dice nada al resto, los vampiros escondidos bajo tierra (a los que encuentran de manera milagrosa), el ritual fallido y su final.
Cosas que resultan un pelín molestas. El ritual del final lo realizan a pleno día en un lugar donde entra luz del sol. Bon Jovi se infecta para que la vampira jefa no le detecte pero falla miserablemente por no apuntar antes de disparar, pero peor es cuando la consigue enganchar a una cuerda y ni siquiera trata de cortarle la cabeza o algo, literalmente cualquier cosa en vez de dejarla fuera de su campo de visión hubiera ayudado.
Otra secuela que se limita a vivir de las rentas de una película más que decente. Venga, pasemos a la tercera y última.
No hay comentarios:
Publicar un comentario