sábado, 13 de julio de 2019

Amanece, que no es poco (1989)

Entrada 3700

Hora de otro especial. Esta vez traigo una novedad en la web, he creado una página sobre "Títulos que no me interesan". Por algún motivo creí necesario hacerla. Son los primeros que se me pasaron por la cabeza en ese momento, seguramente iré agregando más a medida que pase el tiempo.

En las últimas 100 entradas ha habido un poco de todo, aunque llevo una temporada tratando de evitar las series nuevas y de hecho salvo las últimas temporadas de unas pocas series que me interesan así ha sido.

Aunque no sea una novedad porque ya hay unas pocas en el blog últimamente he incluido algunas obras de teatro, concretamente de Les Luthiers. No sé si seguiré con ello pero me gusta porque aportan algo de variedad y tampoco es nada fácil pensar en obras de teatro que quiera ver en una pantalla porque preferiría hacerlo en vivo.

También he decidido rematar las películas porno que tenía para dejar el tema durante una buena temporada. Salvo que salga alguna realmente curiosa en los próximos meses raro será ver algún título de dicha categoría. Al terminar de verlas he tratado de recordar si me quedaba alguna más y de hecho sí, las de Jess Franco y Lina Romay, pero de esa pareja hay tantísimos títulos (de todo tipo) que me da un poco igual, además dudo mucho que me ponga con su filmografía próximamente.

Así que a partir de esta entrada volvemos al programa habitual (si es que se le puede llamar así). Aunque he de decir que no sé si este año haré un recopilatorio de películas de tiburones. Solía suceder a finales de Julio coincidiendo con el estreno de una secuela de "Sharknado" (2013) pero este año no hay (harán una sobre una ola de zombies). Tengo una decena de títulos aunque la gran mayoría son cortometrajes, y tienen una pinta horrible. Bueno, ya veremos.

El título elegido para este especial es realmente bueno. Es una de las mejores películas españolas de todos los tiempos, o al menos lo es para mí. Algunos quizás no la conozcáis, pero bueno para eso estoy yo aquí.

Amanece, que no es poco (1989)

Todo un clásico.

A un remoto pueblo manchego llegan un joven ingeniero español, profesor de la Universidad de Oklahoma que disfruta de un año sabático, y su padre, que le ha comprado una moto con sidecar a modo de compensación por la muerte de su madre.

Dirigida por José Luís Cuerda. Fue lo que hizo tras dirigir "El bosque animado" (1987), título que también aparecerá próximamente en el blog. Posteriormente hizo "La marrana" (1992) y la serie para televisión "Makinavaja".

En el reparto hay nombres como José Sazatornil "Saza" (Cabo Gutiérrez), Casto Sendra "Cassen" (Cura párroco), Manuel Alexandre (Paquito), Rafael Alonso (El Alcalde), Fedra Lorente (Susan),  Chus Lampreave (Álvarez), Luis Ciges (Jimmy), Antonio Resines (Teodoro), Miguel Rellán (Carmelo, el borracho), Tito Valverde (Intelectual), Ferran Rañé (Mariano), Enrique San Francisco (Cascales) y Gabino Diego (Portavoz americano). Entre muchos, muchos otros.

Con un reparto así es difícil dejarla pasar, creo yo. Además muchos de los actores que aparecen tienen grandes momentos. A mí me cuesta mucho no pensar en sus personajes de esta película al recordarles.

A pesar de que no fue un gran éxito de taquilla con el paso de los años se ha convertido en una película de culto y es valorada positivamente tanto por la crítica como por la audiencia.

Para aquellos que la conocemos un poco más de lo necesario ha pasado a ser una película fundamental llena de frases y conversaciones inolvidables.

Sin embargo para los que la ven por primera vez resulta un poco difícil de asimilar, especialmente porque hay que entender que no es una película seria. De hecho si tuviera que definirla sería como comedia del absurdo, y yo adoro el absurdo así que quizás estoy siendo demasiado parcial, pero bueno es mi blog y hago lo que quiero.

No es la única película de este estilo, de hecho no hace tanto comenté la también genial "El bengador Gusticiero y su pastelera madre" (1977), cuyo título da una ligera idea de qué nos espera.

Nunca he sido de hacer análisis contemporáneos de las películas que veo, de hecho casi siempre procuro situar las cosas en su contexto y, como tal, tiene mucho más sentido todo. Por ejemplo la frase "¡Coño, el negro!" o la de "pues yo creo que voy a sacarme la chorra" o cuando uno dice que mató a su esposa porque era mala. La primera vez que la vi ninguna de ellas me pareció fuera de tono ni me sonó mal. De hecho ahora mismo TAMPOCO, porque es el tipo de humor que se hacía en los 80.

La película empieza con un zoom desde el espacio hasta un pequeño pueblecito de Albacete. Es un recurso reusado infinidad de veces en todo tipo de títulos. Lo que me llama la atención es que parece Google maps y me hace gracia.

En una de las primeras escenas aparece el grupo de americanos encabezado por Gabino Diego quien clava el acento. De hecho si no conociese al actor probablemente me creería que no es español.

Nge Ndomo dice que no va a misa porque es catecúmeno, lo cual quiere decir que aún está esperando para recibir el bautismo. Aunque como descubrimos poco después lleva 30 años en dicha condición porque es negro (o minoría étnica).

El grupo de agricultores cantando como un coro es una de mis escenas favoritas. Al igual que la mujer que canta ópera en el bar y las del profesor sobre el corazón y los ríos de Europa con un remate matemático.

Los americanos llevan unas camisas en las que pone "The famous and non-existent university of Eaton - USA".

Voy a destacar unas poquitas citas de mis favoritas:
- Una discusión de temas importantes: "Queremos que la muchacha sea comunal", "eso, ¡y turgente!", "turgente ya es", "¡TURGENTE!" y se empiezan a pelear.
- Todo tiene cabida en esta película, incluso la política: "Alcalde, todos somos contingentes, ¡pero tú eres necesario!".
- Este soliloquio de un agricultor es tan emotivo: "Calabaza, se acaba un nuevo día y como todas la tardes quiero despedirme de tí. Quiero despedirme y darte las gracias una vez más por seguir aquí con nosotros. Tú que podrías estar en las mesas de los ricos y los poderosos has elegido el humilde bancal de un pobre viejo para dar ejemplo al mundo. Yo no puedo olvidar que en los momentos más difíciles de mi vida, cuando mi hermana se quedó preñada del negro, o cuando me caparon el hurón a mala leche, sólo tú prestabas oídos a mis quejas e iluminabas mi camino. Calabaza, yo te llevo en el corazón.".
- Esta respuesta, útil para cualquier momento: "Joder, qué bonito es eso. Y qué antiguo, ¿no?".
- La muerte vista de otra manera: "Con los años que llevo de médico nunca había visto a nadie morirse tan bien como se está muriendo tu padre. ¡Qué irse!, ¡qué apagarse!".
- Como empezar una conversación: "Que quería yo hablarle de Dostoyevski".
- Esta conversación entre un padre y su hijo no tiene precio: "Supongo que me respetarás, ¿eh, Teodoro?" "¿Qué guarradas está usted pensando, padre?", "Déjate, déjate, que un hombre en la cama siempre es un hombre en la cama, ¿eh?".
- Esta frase también me encanta: "¿Es que no sabe que en este pueblo es verdadera devoción la que hay por Faulkner?".
- La conversación de una sobrina y su tío también tiene tela: "De todas maneras, para contarme esto no tenías por qué meterte en mi cama." "Ay qué tonto, pues es verdad. Bueno, ya que estoy aquí...". Y sí, a continuación sucede lo que piensas, aunque no lo muestran (lo confirman más tarde).
- Como responder a un pesado: "Me cago en todos tus muertos, Tirso. Me cago en todos tus muertos uno a uno. La tabarra que me estás dando, virgen santísima. ¿Pero yo qué te he hecho a ti?, vamos a ver.".
- En su simpleza radica su genialidad: "¿Y esto lo saben en Madrid?".
- Algo de diplomacia: "Yo es que quería defender un poco a los americanos porque también tienen cosas positivas.", "Vete a la mierda, hombre.".
- Y para finalizar: "¡Yo no aguanto este sindiós!" y poco después "Me cago en el misterio.".

En fin, una película a la que me encanta acudir cada cierto tiempo porque está llena de momentos que disfruto enormemente.

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