Estamos en el año 2015. El gobierno estadounidense ha decidido prohibir el uso de los vehículos que funcionan con gasolina. Pero quedan aún unos cuantos renegados que se oponen a las autoridades y no se detendrán ante nada.
El coche que da título es concretamente un Pontiac Firebird Trans Am de 1980.Los DVC son quienes se dedican a intentar detener a los que aún usan vehículos motorizados a gasolina. Son las siglas de The Department of Vehicular Control. La película empieza con una canción titulada "Dee Vee Cee" que habla sobre su origen.
Aunque está situada en el año 2015 (casi 35 años después de ser grabada) en realidad no se ve nada que podríamos definir como futurista. De hecho los conductores usan radios para comunicarse entre ellos y los vehículos son exactamente los mismos que habían a principios de los 80.
Viene a ser la típica americanada sobre coches de gran potencia, la defensa de la libertad y una subtrama de un senador que puede revocar la ley contra la gasolina al que han de proteger a toda costa.Recuerda, en cierta manera, a la serie "The Dukes of Hazzard". Incluso la música es similar. Pero no me ha parecido tan entretenida.
No es lo peor que he visto, pero tampoco la volvería a ver. De hecho ya me estoy olvidando de ella.
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