El nacimiento de un nuevo bebé hace que uno de los trabajadores del campo se tenga que ir a buscarse la vida en la gran ciudad. Pero al llegar allí los obreros de una fábrica se acaban de poner en huelga. Él, sin saberlo, hace que uno de sus amigos termine arrestado y cuando protesta le alistan y le mandan a la recién iniciada Primera Guerra Mundial.
Le añadieron la música en el año 1969. He de decir que gana mucho con ella. Hay partes en las que incluso usan sonidos para mejorar la experiencia, como el sonido de las ametralladoras en la guerra.
Me acabo de dar cuenta de la cantidad de paralelismos que tiene con otras películas de gente que está pasando un mal momento y se ven obligados a hacer cualquier cosa para poder salir adelante como “The Grapes of Wrath” (1940) o “Plácido” (1961). Y es que aunque esté situada en un momento muy diferente y en un país lejano algunas cosas son iguales. El pobre es pobre sin importar la nacionalidad.
Me fascina la parte en la que muestran a los brokers de bolsa. Visten todos de manera similar y si no me llegan a decir que es San Petersburgo a principios del siglo XX hubiera creído que se trata de Wall Street. Muy capitalista todo.
Se trata de un drama social de un calibre impresionante. Las familias de los obreros son las que padecen porque el dueño de la fábrica ha decidido aumentar sus horas de trabajo, debido a un contrato con el gobierno. Eso hace que digan basta y vayan a la huelga pero al dueño se la trae al pairo y trae otros trabajadores.
Acabo de recordar que hay otra película bastante famosa de esa misma época, también soviética, titulada “Stachka” (1925) (osea, la huelga), que por el título parece que tengan algunas similitudes. La tengo preparada para ver en un futuro no muy lejano.
Las escenas de la guerra son muy crueles y muestran un montón de cadáveres. El mensaje final es “hemos estado luchando durante tres años sin saber muy bien por qué motivo”.
En esencia, los trabajadores se ponen en huelga y todo apunta a que habrá una revolución así que los que mandan (me hace gracia esa parte porque no muestran sus caras) deciden meterse en una guerra para romper la huelga, cosa que funciona, pero claro la situación de las familias humildes antes de la guerra ya era precaria así que cuando empiezan a escasear los alimentos los soviets se rebelan y cuando regresan las tropas del frente atacan a los que mandan.
Un detalle importante es que los personajes no tienen nombre, no pretenden plasmar la historia de unos héroes en concreto sino cómo la ciudad de San Petersburgo pasó a llamarse Leningrado.
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