Tras las pruebas nucleares en los años 40 creció el rumor de que se estaban creando en secreto hombres artificiales. Pernat es investigado por la muerte de un médico vecino suyo, pero en realidad él es artificial y su original ha sido destruido.
Resulta curiosa la escena del ciego que va con un amigo y negocian con una prostituta. Al final la convencen para que se folle al ciego mientras el otro mira para poder describirle qué sucedió posteriormente.
Me ha costado un poco darme cuenta de la cantidad de “pistas” que dan sobre que no es él desde bien temprano. Por ejemplo la escena en la que le dan otro abrigo y cuando recoge las gafas de un cadáver que están trasladando frente a él son significativas. No pueden darle el suyo porque lo lleva su yo real y las gafas son suyas también, no me he fijado en que el cadáver era él.
Posteriormente inciden en esa idea de manera continua, cuando le dicen que tiene un hermano porque hay otro con su mismo apellido o cuando no recuerda cosas que pasaron recientemente.
Visualmente hablando es similar a otras películas soviéticas de la época, claramente influenciadas por el cine mudo. Además se apoya en diversas temáticas como es la leyenda del golem, el tarot o incluso un mundo post apocalíptico donde la gente está desensibilizada y desapasionada por lo que hace, viviendo como buenamente pueden.
Los personajes con los que se cruza el protagonista son extraños y a medida que avanza la historia la cosa va a peor.
Sin embargo carece de coherencia narrativa, por no decir que no hay apenas argumento, en esencia es un hombre artificial reencontrándose con el pasado de su yo original.
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