大江戸レイプマン (1996)

El título se traduce como "El Rapeman de Edo".

Estamos en la era Edo. Un enmascarado vestido de negro patrulla las calles para evitar las injusticias. Y su mejor arma contra las mujeres que cometen crímenes es la violación. Su nombre es Reipuman. De día trabaja en unos baños públicos. La aparición de una mujer muerta hace que se ponga a indagar, detrás de todo hay una mujer con una máscara roja ya que alguien le dejó una cicatriz en la mejilla. Pero quien comete los asesinatos es alguien con una máscara blanca y trata de echarle la culpa a Reipuman tras asesinar a una chica a la que acaba de violar, dejando su carta de presentación.

Esta y la secuela que tuvo fueron dirigidas por Naoki Uesugi. Son sus únicas películas, aparte ha dirigido algunos episodios de series de televisión.

Esta versión del personaje se asemeja mucho a Batman. Lleva capa, usa una cuerda con gancho para desplazarse y lanza una especie de piezas de metal con forma de C para aprisionar a sus presas. Aparte también tiene una katana para poder enfrentarse a los hombres malvados.

Lo primero destacable es la cantidad de escenas de sexo (no se ve nada) y de desnudos (con los genitales censurados) que tiene.

Es un argumento un poco retorcido, pero no deja de ser el típico de investigación que nos ha mostrado el personaje en las 7 películas anteriores. La diferencia es que está ambientado en la época Edo, con lo cual visten diferente.

La mala tiene un lugar donde practican el sado maso y también se pone un strap-on (consolador en la cintura) para poder follarse a las mujeres ella misma.

En su último acto Reipuman no está solo, le acompaña su padre.

Bien, no es excesivamente diferente a las anteriores, incluso tiene algo de comedia. Venga, que ya sólo queda la última.