Aquí la titulamos "Herbie en el Grand Prix de Montecarlo".
Jim Douglas vuelve a recuperar a Herbie y se marcha con él y su socio Wheely a Francia para participar en una carrera. Mientras tanto un diamante muy importante va a ser expuesto en un museo de París y unos ladrones lo roban escondiéndolo dentro de Herbie.
Tenemos un cambio en la silla de director, esta vez es Vincent McEveety. Ha basado su carrera principalmente en la televisión donde ha dirigido episodios de "Columbo", "Star Trek" o "Murder, she wrote", aunque también ha hecho películas como "The Watcher in the Woods" (1980) y el capítulo piloto "Wonder Woman" (1974).
Pero regresa Dean Jones (Jim Douglas), de la primera película. Destaca también Don Knotts (Wheely Applegate), conocido por "It's a Mad Mad Mad Mad World" (1963) y la serie de 1979 "Three's Company".
Viajaron a Francia y a Mónaco para rodarla. Aunque hay partes rodadas en California.
Jim dice que lleva 12 años retirado de las carreras. Teniendo en cuenta que la primera película es de 1969 y que tras ella, según dijeron en la secuela, participó en algunas carreras más no me cuadran las cuentas.
No explican nada de qué pasó con la anterior dueña de Herbie. Ni tampoco con la chica de la primera película.
Herbie se enamora de un coche bastante peculiar. Se trata de un Lancia Scorpion "Giselle" de 1976. Lo realmente curioso es que deriva del modelo Montecarlo, con lo cual encaja muy bien con el título de la película. Además, lo conduce la "chica" de la película interpretada por Julie Sommars (Diane Darcy).
La verdad es que salen unos cochazos. Tenemos un Lamborghini 400 GT 2+2 de 1966, un Lamborghini Miura P400 S de 1969, un Porsche 911 S de 1970, un De Tomaso Pantera de 1971 y cuatro Ferraris (un 225 S de 1952, un 365 GTB/4 de 1971, un 365 GTC/4 de 1971 y otro 365 GTC/4 de 1972). El rival a batir va en un Laser 917, que viene a ser una modificación de un Porsche 917.
No deja de ser gracioso que un alemán (el malo) se burle de un estadounidense por llevar un coche alemán.
Esta vez vemos a Herbie en solitario durante bastantes escenas, porque quiere conquistar a Giselle, la cual también tiene cobra vida propia.
Creo que la historia falla en bastantes aspectos. La chica que no se cree que Herbie y su coche están "vivos" es uno de los principales, que el policía averigüe que el diamante está en Herbie sin más, también me molesta que ni siquiera intentasen conectarla con las anteriores películas.
Aparte que el "malo" es sólo un imbécil y apenas le vemos competir.
Durante la carrera Herbie tiene que adelantar a todos los coches 5 veces.
Ha regresado el tema carreras y le han agregado el componente de un robo, pero se queda muy por debajo de la primera película.
Lo que realmente me sorprende es que tras esta aún hicieran una secuela más. Supongo que querían exprimir el limón al máximo, pasemos a ella.
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