Baltasar acude a comisaría para sacar a su hijo Jacobo. Es un constructor adinerado con chófer y una amante con la que tiene una hija. Un periodista quiere hacer una película para una tipa que se folla, pero financiada por Baltasar.
Está basada en la novela homónima de Eduarda Targioni, publicada en 1977.
En el reparto tenemos a Fernando Fernán Gómez (Baltasar Fernández Candela), Paul Naschy (Ramón), Rosanna Yanni (Vicky), Agustín González (Ricardo Márquez), Rafael Hernández (Ortega) y Paloma Hurtado (Iluminada).
Por cierto, seguimos aún en la época del destape. Los desnudos parecen justificados pero en realidad se centran demasiado en ellos, aparte que son de cuerpo completo.
Su personaje me recuerda mucho a uno de la serie "Sherlock", el que almacenaba en su memoria todo tipo de datos para chantajear a la gente más importante de Inglaterra.
Es una película en la que a ratos oímos los pensamientos de algunos. No siempre son cosas bonitas.
Ramón es chófer pero también está tratando de montar un partido político de izquierdas.
El mensaje de la película es que todas las mujeres son unas putas. Y quiero decir literalmente, la gran mayoría de las que aparecen practicaron la prostitución en un momento dado de su vida.
Y los hombres se dividen entre los que son adúlteros y los que van demasiado borrachos como para follar.
Sale una actriz rusa llamada Yelena Samarina (Amanda) haciendo de española (sin acento, lleva un montón de años aquí) y una llamada Catherine Basseti (Katiuska) haciendo de rusa con un acento que no tengo nada claro, es más parecido al francés. Igual hubiera sido mejor intercambiarlas, digo yo.
Pero bueno, es una película que a pesar de contener bastantes desnudos no la considero erótica. No hay apenas sensualidad, a ratos parece que se decanten por la comedia pero en realidad es un ambiente demasiado serio. Aparte que no paran de pasarles putadas a todos.
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