Estamos en el año 984, el Rey Freyne es asesinado en una revuelta de campesinos y su hijo Einon resulta malherido al chocar con Kara. La Reina Aislinn toma una medida desesperada para salvarle, pedir ayuda a Draco, un dragón para salvarle. 12 años más tarde Bowen se ha convertido en un matadragones y el Rey Einon en un tirano.

La producción empezó en 1992 cuando Jim Henson fue contratado para crear al dragón. Llegó a hacer una cabeza enorme animatrónica y otra de un 25% del tamaño real. Tras ello el proyecto se paralizó.

La escena del principio en la que entran en el poblado para masacrar a los aldeanos me recuerda mucho a "Monty Python and the Holy Grail" (1975). Por ejemplo el Rey Freyne viste de forma similar al Rey Arturo.

Resulta gracioso oír la voz de Sean Connery, me recuerda a los sketches de "Jeorpady" en el SNL. También me ha hecho gracia que las tumbas de Avalon parezcan penes.
En cierta manera me recuerda a una película española titulada "El Caballero del Dragón" (1985), de Miguel Bosé, cuyo argumento en realidad tiene poco que ver.

Como dije al principio, es entretenida y es mucho decir en comparación con muchas de las películas más modernas. Desde luego el final no da pie para una secuela, pero sí la tuvo. Pero eso será la próxima entrada.
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