El cometa Tiamat está a punto de pasar cerca de la tierra. Mitsuha y Taki se intercambian los cuerpos algunas veces al irse a dormir, aunque les costará bastante darse cuenta de ello porque creen estar soñando. El cometa parece tener algo que ver con lo que les pasa.
De la mano de Makoto Shinkai nos llegó el año pasado este anime que fue la primera película que obtuvo unos ingresos similares a las de Ghibli en Japón. Es el creador de las también muy bien valoradas "Koto no ha no niwa" (2013), "Hoshi o ou kodomo" (2011) y "Byôsoku 5 senchimêtoru" (2007), que espero poder comentar más adelante.Tiamat era la diosa del océano en Mesopotamia y representaba la belleza femenina, la creación y el caos primordial.
El nombre de Mitsuha signfica "3 hojas", su abuela era Hitoha (1 hoja), su madre Futaba (2 hojas) y su hermana pequeña Yotsuha (4 hojas).Me gusta mucho el diseño de los personajes y también el hiper-realismo de los paisajes. Aunque lo mejor es la perspectiva y como consiguen dar un efecto tridimensional a un dibujo en 2d. Y los detalles, todo está lleno de "cosas", por ejemplo las habitaciones de los jóvenes.
La ceremonia del kuchikamesake es visualmente bonita pero bastante asquerosa, la verdad. Se meten el arroz hervido en la boca y luego lo escupen en un recipiente donde lo dejan macerar durante el tiempo suficiente.
Resulta muy graciosa la escena en la que ella se despierta en el cuerpo de Taki, un chico, y de repente dice "hay algo más ahí" mirándose la entrepierna. Aparte de la típica reacción de timidez japonesa.El planteamiento me recuerda a la serie "Cinderella Boy". Aunque las semejanzas son sólo puntuales.
En un momento dado se ve una Famicom y una Gamecube naranja con diseños exclusivos para Japón.
Visualmente tiene algunas imágenes increíbles. La historia mola, al principio es bastante graciosa, luego pasa a tener intriga y acción y finalmente es muy emotiva.
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