The Mystery of Marie Roget (1942)

También conocida como "Phantom of Paris".

Estamos en 1889, en París. Marie Roget, una cantante famosa, lleva 10 días desaparecida y la policía no tiene ninguna pista. El jefe de policía acude a su amigo el Dr.Dupin para que le preste su ayuda. De repente aparece el cuerpo de una mujer flotando en el río. pero su cara ha sido arrancada y las primeras suposiciones apuntan a que ha sido cosa de un animal. Aún así la identifican como la desaparecida, pero de repente aparece en su casa.

La novela de Poe estuvo basada en el asesinato de Mary Cecilia Rogers, a quien encontraron flotando en el río Hudson, en Nueva Jersey. Poe situó la acción en París y puso al detective C. Auguste Dupin al cargo de la investigación. Antes de ser publicada se supieron las circunstancias del crimen y Poe había acertado plenamente.

Es una secuela de "The Murders in the Rue Morgue" (1932), sin embargo hay bastantes cambios, empezando por que la acción está situada 44 años más tarde. Al principio mencionan el caso.

Sigue bastante bien la novela, o al menos lo que recuerdo de ella. Es una de las historias que menos veces he visto adaptada, de hecho sólo recuerdo esta versión. Y no es porque sea una mala historia, ni muchísimo menos, es quizás porque el estilo detectivesco recuerda demasiado a las novelas de Conan Doyle, quien basó en parte a su personaje más famoso en Dupin.

Eso es quizás el mayor elogio que podría hacérsele a esta película pues está basada en el origen de tantos y tantos personajes, detectives que trabajan al margen de la policía pero que se apoyan en ella cuando lo creen necesario. Con un perfil bastante arquetípico, extremadamente inteligentes, con un toque singular y peculiaridades que lo hacen único.

En las novelas Dupin era capaz de averiguar todo tipo de detalles leyendo tan sólo los artículos de los periódicos en los que se hablaba de los casos, aquí usa un método más normal siguiendo las pistas y fijándose en los detalles que nadie más ve, pero al final resultan ser la clave.

Personalmente me ha gustado por lo que es más que por la película en sí, la cual en su momento tendría alguna relevancia pero dudo mucho que destacase cuando Basil Rathbone inundaba las carteleras con su versión de Holmes.