También conocida como "Frankenshark".
Un tío usa una crema para que le crezca la polla a pesar de lo poco interesada que está su chica, pero le provoca un efecto secundario, se le queda como si fuera de arcilla y decide modelarse un tiburón en ella.
Esta es una de las sorpresas que tenía reservadas este año junto con la peli porno del otro día (y otra más que ya llegará). Y le tengo unas ganas enormes. Encontré el trailer de pura casualidad mientras buscaba otro título y no pude contenerme, ¡tenía que hacerme con ella!.
Sé lo que estáis pensando, ¿cómo es que nunca oí hablar de esta maravilla hasta ahora? pues porque es un producto amateur que habrán visto 3 personas máximo y una de ellas soy yo. Pero vamos, es la razón de mi existencia en este mundo, no hace falta que sufráis tontamente.
En esencia la película está compuesta por dos tipos de escenas. En una salen tías en bolas moviéndose a cámara lenta haciendo el imbécil con un tiburón de juguete que va creciendo de escena en escena. Todo ello mientras suena metal de fondo. For reasons.
El otro tipo de escena consiste en diálogos sin ningún tipo de gracia, sentido y que no revelan absolutamente nada nuevo. Lo cual es peor cuando descubres que uno de los protagonistas es el director, un tal Bill Zebub, que encima no se sabe sus frases, se nota que hay un montón de cortes porque tuvieron que repetir las tomas. Aparte que está claro que su única intención es tocar las tetas de las chicas repetidamente.
También sale una araña de juguete de un metro de largo que se folla a un par de tías en el bosque y luego las deja paralizadas.
Pasada una hora (más o menos) el tiburón ha crecido tanto que le ha salido una polla en la aleta dorsal, aparte de la suya, y va por ahí violando mujeres que se encuentran convenientemente desnudas.
En fin, si queréis verla preparaos para las dos horas y media más largas de vuestra vida. Os lo advierto, no es porno, no es erótica, sólo salen tías desnudas y es realmente dura de ver.
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