Venga. uno más.
Una mujer está cansada de la gran ciudad así que coge el coche y se va de acampada a un bosque solitario. Tras mucho andar acaba encontrando un lago junto al cual monta su tienda. Pasa una noche allí y vuelve a la ciudad. Allí se dedica a mirar las fotos que ha tomado y descubre unas en las que alguien usó su cámara mientras dormía.
Su duración es de 12 minutos.
Dirigido y coescrito por Rod Blackhurst.
Basado en hechos reales.
Es todo muy bonito, muy paisajístico, muy lánguido y lento. No sucede absolutamente nada relevante hasta el último minuto.
No vemos a nadie, no hay ni siquiera un ruido que pueda alertar al espectador, absolutamente nada.
Dicho de otra manera es bonito de ver, pero salvo la escena final no tiene nada peculiarmente interesante.
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