Venga, que aún quedan.
Una mujer se despierta sin apenas oír y con media cabeza vendada. Le han puesto un implante y tras ajustarlo puede oír bien. Se la encontró la otra mujer que le habla y le dice que la encontró tirada en su baño. Tras eso ella empieza a recordar qué le sucedió la noche anterior.
Su duración es de 11 minutos.
Dirigido y escrito por Finn Callan. Esto y su secuela ha sido lo último que ha hecho. Con lo cual he decidido verla a continuación, en lo que será mi próxima entrada.
Recomiendo muchísimo que lo veáis con los subtítulos del vídeo de YouTube, me he estado partiendo la caja porque no paran de poner emojis representando lo que sucede cuando no hablan. Es genial.
En esencia la tal Mary veía a un extraño ser de ojos saltones que no paraba de mirarla y decidió echarse lejía en los ojos y clavarse un cuchillo en los oídos.
El monstruo recuerda bastante a la conocida como Momo (que originalmente era una obra llamada Mother Bird de Keisuke Aiso.
Es una manera como cualquier otra de enfrentarse a un problema. No digo que sea la mejor, ni la peor, pero habían otras vías de afrontarlo, sin duda.
Lo realmente gracioso es que la tipa sólo se queda ciega de un ojo y con el aparato auditivo no ha adelantado gran cosa.
Los efectos especiales se reducen al ser y no está demasiado logrado, especialmente lo que son los ojos que no parecen demasiado realistas. Los oídos y demás sí está bien hecho.
En fin, a ver cómo siguió la cosa.
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