También conocida como "St. John's Wort".
Nami es una estudiante que se dedica a hacer dibujos para unos que están creando un juego. Acaba de heredar la propiedad donde nació y pasó los primeros años de su vida y decide ir allí con el productor de dicho juego. Allí descubre que su padre fue un pintor famoso y que vivía recluido en su casa. Al explorarla no se dan cuenta de que hay alguien que les está observando en las sombras.
El título en inglés en realidad es una buena traducción del japonés. Se refiere a la hierba de San Juan, también conocida como hipérico. Es una planta común originaria de Europa pero que se puede encontrar en América y Australia, también en partes de Asia. Tiene un uso medicinal para tratar la depresión moderada y la ansiedad. Según la película es una planta que significa "venganza".
Sobre la historia, originalmente fue un juego titulado "Otogirisō" para la Super Famicom lanzado en 1992. Y en el 2016 sacaron una secuela titulada "Kirigirisō", para Windows y OS X.
Tratan de darle un aspecto de videojuego antiguo, ciertamente. En el arranque incluso vemos algunos diálogos en texto sacados de uno, no sabría decir si es el juego original pero tiene pinta. Cuando llegan a la casa vuelve a suceder un diálogo de este estilo con el que la ha estado cuidando durante 20 años, a quien nunca llegamos a verle el rostro.
Las imágenes que transcurren durante el día brillan mucho, muchísimo, y las que transcurren por la noche son muy oscuras.
El tipo se dedica a grabarlo todo con una cámara de vídeo. Hoy en día sería de lo más normal pero entonces resultaba algo llamativo. Aparte no se trata de una "found footage", por suerte.
Uh... iba a poner algo en plan "es todo demasiado obvio" cuando de repente ha llegado un giro argumental inesperado que me ha dejado bastante roto.
El final es bastante bestia. Lástima que los efectos especiales no fueran tan buenos, hubiera sido genial más realista todo. Vale, hay varios finales, pero no importa, son similares.
En todo caso creo que alargan demasiado un argumento que no da TANTO de sí. Podrían haberla dejado en una hora o incluso menos.
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