Aquí la titulamos “Hace un millón de años”.
Un grupo de personas se refugia en una cueva durante una tormenta y se encuentran a un señor que lleva estudiándola desde hace un tiempo porque allí vivieron hombres prehistóricos. Y les narra la historia de dos tribus, los de las rocas y los de las conchas.
Originalmente fue dirigida por D.W.Griffith pero cuando llevaban rodada la mitad de la película tuvo problemas con Hal Roach y pidió que borrasen su nombre de los créditos. Al final aparecen como directores Hal Roach y su hijo Hal Roach, Jr..
Del reparto destacan los nombres de Lon Chaney, Jr. (Akhoba), conocido por “The Wolf Man” (1941), salió en “High Noon” (1952). Victor Mature (1940), el protagonista de “Samson and Delilah” (1949). Carole Landis (Loana), saló en “I Wake Up Screaming” (1941). Rosemary Theby (persona de las conchas), salió en “A Connecticut Yankee in King Arthur’s Court” (1921), fue su última película porque poco después se retiró.
Los efectos especiales fueron tan buenos que reusaron algunas escenas en títulos posteriores hasta bien entrados los años 60.
En Gran Bretaña sufrió una severa censura debido a las leyes en contra del maltrato animal. De hecho dejaron de emitirla por televisión por esa misma razón.
Creo que lo mencioné en una entrada de una película similar. Al hablar en “idioma prehistórico” los actores pueden decir cualquier cosa y no pasaría nada. En este caso no sé hasta qué punto trataron de ser coherentes desarrollando un pseudo-idioma, como hicieron en otras películas.
Me gusta mucho como dejan abandonados a sus muertos/malheridos, independientemente de quién sea.
Los animales prehistóricos son una combinación de varios elementos. Por ejemplo animales grandes disfrazados, como elefantes y vacas “con pelo”, un cerdo como un triceratops o un cocodrilo con espinas. También muñecos, personas disfrazadas y animales pequeños enfocados para que parezcan gigantes, como un dragón de komodo (bueno, pequeño es una forma de hablar), una serpiente o un pangolín (con cuernos tipo rinoceronte).
El cocodrilo aparece luchando con un varano acuático. Y a la serpiente se la come una mangosta.
Es una película que marcó un estilo y que tuvo un remake que es básicamente igual pero en color y con Raquel Welch. La principal diferencia con otras películas de esta misma temática es que aquí tenemos una introducción que nos explica un poco la situación.
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