Otro cortometraje.
Un hombre se levanta de su silla, se pasea por su casa y vuelve a sentarse para tomar algo de whisky, tras lo cual cae dormido. Al despertar cree ver a una mujer, pero es todo un sueño. Luego se despierta de verdad y vuelve a pasear por su casa, para repetir el proceso cuando un cuervo entra por una ventana.
Su duración es de 7 minutos.
Empieza con un texto que es el principio del poema "The Raven" de Edgar Allan Poe.
Es en blanco y negro y empieza con una escena grabada con un dron que va dando vueltas por un altillo (donde está sentado el protagonista) e incluso sale por una ventana al exterior. Hace años hubiera sido algo impresionante, hoy en día no mucho.
Se supone que ese vuelo (del cual vemos otra escena similar posteriormente) representa al cuervo.
No tiene narración, ni el hombre ni la mujer dicen nada. El cuervo tampoco. Sólo oímos música de fondo.
Pero bueno, no quería rematar este recorrido con un título tan triste, aún queda uno más que no adapta ninguna de las historias de Poe. Pasemos a ello.
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