Un pescador cree haber visto una mujer en el barco de su amigo, se lo cuenta pero no acaba de creerle. Al día siguiente aparecen restos medio devorados de peces en otros barcos de pescadores. Luego el amigo se encuentra con la chica, quien huye al oír acercarse a los pescadores.
En una de las primeras escenas vemos a un chico tocando el ukelele mientras silba. Resulta que yo tengo uno y sé tocarlo. Lo que suena no se corresponde con las imágenes, de hecho apenas mueve la mano en los trastes, lo cual no tiene demasiado sentido.En esencia Katsuhiko, la chica, pesca peces con facilidad usando sólo sus manos, buceando en bikini en medio del océano. Y al tipo le parece de lo más normal.
Hacen mención de varios ataques de tiburones en el pasado, de cómo mataron uno. Incluso parece que la desaparición de un hombre esté relacionado también con un tiburón.Por fin pasamos a las escenas subacuáticas, he de decir que están muy bien grabadas. Eventualmente aparece el tiburón, más o menos a la media hora de película. Por desgracia no se ve con demasiada claridad, aunque el protagonista parece estar muy cerca suyo e incluso vemos un brazo cercenado en el fondo marino. Menos es nada.
Según explica Hide, el anciano del pueblo, esa chica es la encarnación del espíritu de dos tiburones que mató su abuelo. Así que técnicamente es un tiburón y forma parte de la trama principal.Es una manera un tanto retorcida de verlo, pero, como he dicho en otras entradas, se me empiezan a acabar los títulos.
Aún así la considero una película pobre en cuanto a temática tiburones. Y la historia en sí está bien, pero se me ha hecho un poco larga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario