Esto no se termina nunca.
Tras el fallecimiento de la madre de Sarah, ella y su amiga Linda empaquetan todo para marcharse a vivir a otro lugar. Entre las cajas encuentran una con álbumes de fotos, cartas "de amor" y una cámara Polaroid de las viejas. Deciden usarla para hacerse una fotografía juntas.
Su duración es de 15 minutos.
Dirigido y escrito por Lars Klevberg. Fue la base de su largometraje "Polaroid" (2019). Es quien dirigió el infame remake "Child's Play" (2019).
Del reparto me ha hecho gracia el nombre de la actriz Thea Sofie Loch Næss (Linda).
La cámara es una Polaroid Sx-70 que tenía la peculiaridad que se plegaba para ocupar menos espacio. Salió a la venta a principios de la década de los 70.
Resulta cómica la manera en la que se asustan y empiezan a correr por la casa como pollos sin cabeza cuando el "ser" va a por ellas.
En resumen, que no lo cuentan pero intuyo que es la misma historia que la película, los que se hacen una foto con la cámara esa son los siguientes en morir. Sí, como en "Ringu" (1998), con la diferencia que sucede poco después de hacerse la foto.
Para grabarla usaron a tres actrices metidas en una casa, una de ellas con algo de maquillaje, mucha imaginación respecto a los ángulos de cámara e iluminación y poco más. Que no está mal, ojo, sacan partido a todo ello más que de sobras, de hecho si se hizo una película es porque tuvo bastante éxito en su momento.
Lo cual no acabo de entender porque no acabo de verle el atractivo. Es que me parece una historia demasiado sobada, quizás no tanto en el cine europeo pero definitivamente sí en el oriental.