Unos mercenarios roban 300,000 dólares en oro, su líder decide quedarse con todo matándoles, tras ello huye a Nairobi. Pero Burt, uno de ellos, consigue sobrevivir y va tras él. Allí descubre que controla unos gorilas pero consigue ayuda de Eva, una mujer salvaje capaz de hablar con los animales.

Echan mano de bastantes imágenes de stock de animalicos. Son escenas en las que se ralentiza mucho la acción y que en realidad no aportan gran cosa, salvo reforzar la idea de que están en África.
Los gorilas son de una especie que consideran sagrada los nativos. La verdad es que no se esforzaron demasiado con los disfraces, parece que estén anoréxicos.

La razón por la que he decidido incluirla en este recorrido de títulos sobre Kong es por el título que recibió en EEUU, "Kong Island". El cual carece de sentido, no sale ninguna isla ni tampoco nada que recuerde a Kong. Salen gorilas controlados con unos aparatos implantados en sus cerebros pero poco más.
Pero vamos, como pasa con las películas sobre tiburones nunca sabes que te vas a encontrar hasta verlas (en el blog he comentado ya auténticas marcianadas dentro de dicha categoría).

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