Angèle es una vieja que vive en un pueblo quien tiene miedo a las máscaras por ello se va a las montañas cuando hay carnaval. Una noche se le aparece el demonio y le propone jugar una partida de dominó, si gana le devolverá la juventud, si pierde le entregará su alma. Y ella acepta.
A pesar de tener un estilo bastante simple, en apariencia, la animación es muy fluida y cuando se centra en algún detalle, como la protagonista, está bastante detallado.
Me encanta como cuando vemos a algunos de los personajes con máscaras sus caras se asemejan mucho a las normales.
También la parte en la que se las quitan tras la fiesta, especialmente la del hombre que va de mujer y el otro que creía que había ligado, es bastante graciosa.
Detalles como el nombre de la vieja, el que va disfrazado de casa con el humo en su chimenea incluido o el que va de pájaro que se cae del hilo donde está al quitarse la máscara.
Detalles como el nombre de la vieja, el que va disfrazado de casa con el humo en su chimenea incluido o el que va de pájaro que se cae del hilo donde está al quitarse la máscara.
Es una historia sencilla pero con un par de giritos bastante buenos. Me ha gustado mucho.
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