
Unos jovenes cogen un desvio en la carretera y terminan en "Pleasant Ville" donde les acogen justo cuando va a empezar una fiesta local, al momento llegan otro coche y una moto y se unen al festejo, siendo los extranjeros los principales invitados. Lo que no saben es que en ese pueblo tienen unas costumbres muy peculiares respecto a la fiesta local y sus invitados de honor.

A eso habria que añadirle los topicos de paletos sureños americanos, osea, ignorantes, zoofilicos y que estan como una cabra.
Gran frase: "Mi madre me da un dolar por cada gato muerto que le llevo a casa", si es que son todo un encanto en este pueblecito. Y no es la unica chocante.

Robert Englund interpreta al alcalde del pueblo, que esta vez tiene 2001 habitantes, lleva un parche con la bandera sureña. Esta bien en su papel pero no es espectacular precisamente, queda atras su Freddy Krueguer.
Comparandola con la clasica no le llega ni a la suela de los talones. Como pelicula de terror tiene sus momentos pero creo que los personajes del pueblo estan excesivamente estereotipados. Ah y el final me ha dejado indiferente.
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