La matanza caníbal de los garrulos lisérgicos (1993)

Venga, ahora una peli friki con aroma gallego.

En una masia gallega en medio de ninguna parte viven los Machado, una familia que se ha dedicado toda la vida a la produccion artesanal de embutidos. Un grupo de jovenes ha tenido un percance con el coche al regresar de un concierto y acuden a ellos para pedirles ayuda.

"Basada en hechos reales" o asi reza el cartel del principio que ademas añade que han cambiado el nombre de los participes y que la han realizado solo para que no se vuelvan a repetir los hechos. La primera escena es un homenaje a "Two Thousand Maniacs!" (1964), en ella ponen un cartel en medio de la carretera para que se desvie algun coche hacia el sitio donde viven los asesinos.

La familia recuerda a los de "The Texas Chain Saw Massacre" (1974),, de hecho el argumento se le parece bastante en general, incluso Rocco se parece al "abuelo". Tambien hay una referencia a la saga "The Evil Dead" (1981) cuando la chica empieza a armarse con todo lo que pilla. Y al igual que en "Attack of the Killer Tomatoes!" (1978) anuncian una secuela que jamas llego a ser rodada, en este caso hubiera sido "La Matanza Caníbal de los Garrulos Lisérgicos Parte II (La ciudad no es para nosotros)".

Atentos a la participacion de Julian Hernandez, el cantante de Siniestro Total, de  César Strawberry, el cantante de Def Con Dos, y Silvia Superstar, la cantante de Killer Barbies. Aparte esta protagonizada por Manuel Manquiña, es una de sus primeras peliculas, quizas le recordeis por sus papeles en "Airbag" (1997), "Año Mariano" (2000) o como el protagonista de "Atilano, presidente" (1998).

La pelicula fue filmada en una casa rural que pertenecia a uno del equipo. Es un ejemplo del presupuesto ridiculo con el que contaban. De hecho para poder financiarla vendieron copias de la cinta antes de ser estrenada.

El sonido original era tan horrible que decidieron doblar todos los dialogos, cosa que se nota un monton. Lo que no contentos con ello llenaron  la pelicula de sonidos y musiquillas absurdas.

En fin, un clasico del gore español, imprescindible para amantes del genero.