Una de las películas más recomendadas de este año.
Tras sufrir un ataque brutal por parte de unos locos seguidores de una secta Mia y su esposo se trasladan a vivir a otra casa. Aunque el mal les sigue acechando en forma de una muñeca poseída por un demonio que reclama un alma.
Es la precuela de "The Conjuring" (2013), película que no creo que vaya a ver, al menos próximamente. La primera curiosidad es que la actriz que hace de Mia se llama Annabelle Wallis, cosa que me confundió un poco al principio.
Esta plagada de referencias a "Rosemary's Baby" (1968) (una de mis películas favoritas, dicho sea de paso). Además esta basada en esos hechos reales, en concreto en el asesinato de Sharon Tate en 1969 por parte de la familia Manson cuando estaba embarazada de 8 meses y casada con Roman Polanski.
Lo de la muñeca poseída también se dice que es algo real aunque la principal diferencia es que era otro tipo de muñeca. Estaba hecha de trapo, era de la marca Raggedy Ann y podemos ver una que si es idéntica al final de la película (hay que fijarse mucho porque sale de fondo).
Hay otra curiosidad respecto a la historia y es que es muy similar a la de un episodio de "The Twilight Zone" del año 1963 titulado "Living Doll" en el que una madre la da una muñeca que habla a su hija y poco a poco lo hace de forma más siniestra, sobre su padrastro principalmente. Y para más coñas la madre se llamaba Annabelle.
Es un error creer que es una película sobre una muñeca poseída al estilo "Child's Play" (1988). Aquí el objeto en sí carece de "vida", es el demonio que la posee el que ejerce la influencia malvada en la casa. Es un punto a favor ya que evita caer en los tópicos de cine de "objetos poseídos" (por generalizar un poco).
He leído algunas criticas pero no he sacado demasiado en claro ya que todas se centran en compararla con la otra película. A mi me ha gustado más de lo que me esperaba. Tiene un toque clásico y hace uso de algunos recursos modernos pero sin agobiar al espectador, por ejemplo juega mucho con el sonido en momentos puntuales.
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