martes, 4 de marzo de 2014

Sgt. Kabukiman N.Y.P.D. (1990)

Sigamos con más Troma.

Durante una visita a un teatro japones un policía presencia un tiroteo en el que matan a varios actores, decide intervenir y mata a uno de los malos pero el resto huyen. Durante todo el trasiego uno de los actores moribundo le coge y le besa metiéndole unos gusanos en la boca y convirtiéndole así en Kabukiman. Eso hace que aparezca su cara pintada y lleve un kimono, por ello sus compañeros se burlan de el.

He decidido alargar mas este pequeño ciclo de Troma con tres títulos que tengo pendientes desde hace demasiado. Sobre todo el que nos ocupa, llevo queriendo verla desde que oi hablar de ella por primera vez en los 90 pero por unas cosas u otras siempre la he ido dejando de lado.

La película en si es una de las mas absurdas de las de la Troma, superando incluso las del Vengador Toxico. El personaje esta mas cerca de unos dibujos animados, le vemos convertirse en payaso y usar sus "poderes" de forma ridícula entonces, también un camión le pasa por encima dejándole chafado, bueno y un montón de situaciones ridículas como la de cuando vomita mientras vuela.

Y el argumento es bastante simple, dentro de lo que cabe, una vez se entrena para poder dominar lo de convertirse en Kabukiman ya todo es mucho mas simple, detiene a los malos, la gente le adora y tal, mas o menos como con el Vengador Toxico solo que al principio se burlaban de Kabukiman con mucha razón y a Toxie le temían.

Nadie estuvo interesado en estrenarla en USA hasta el año 96, coincidiendo con otra película de Troma, "Tromeo y Julieta" (1996). La financiación japonesa vino porque Lloyd Kaufman bromeo con hacer un spin-off con el personaje de Kabuki-boy que sale en "The Toxic Avenger Part II" (1989).

Sobre la mesa del director de policía hay un cartel de "Se busca" en el que aparecen dos personas, son Lloyd Kaufman y Michael Herz, los fundadores de Troma y productores de esta película.

Me la esperaba de otra manera quizás, esta llena de situaciones cómicas pero en plan ridículas. Es quizás demasiado "payaso" en mi opinión y los sonidos con los que refuerzan los gags no ayudan, aunque en realidad no dejan de ser mas que los típicos que usan en las películas de Troma.

En pocas palabras no deja de ser otra película de la Troma, solo que metiéndose de forma especial con los tópicos japoneses. Lo mejor la parte final.

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