Aquí la titulamos "Noé".
En un mundo donde los hijos de Caín hacen lo que les viene en gana, Noé y su familia intentan encontrar un sitio donde vivir. Tras recibir una señal divina se encamina en busca de su padre, Matusalén, quien le confirma (a su manera) sus peores temores, la próxima llegada de un cataclismo que destruirá la humanidad, en forma de agua. Por ello comenzará la construcción de un arca para salvar a su familia y los animales.
Veamos, partiendo de la base que la narración bíblica la conozco sólo a retazos he de decir que más o menos viene a seguir la historia original, por supuesto alargada para hacerla durar dos horas (aunque algunos se han dedicado a compararlas y se ve que difieren mucho). En su aspecto más positivo está el carácter atemporal que ha conseguido dotar Aronofsky sin poner referencias claras a si transcurre en el pasado o en un futuro post-apocalíptico.
Voy a empezar con el reparto, el protagonista es Russell Crowe, con barba de varios días, el cabello rapado (bueno, al principio lleva pelo largo) y una fé absoluta en todo lo que él cree que son señales divinas, un personaje extraño en sí mismo aunque muy tenaz. Jennifer Connelly interpreta a su esposa, es un personaje menos amplio y bastante sencillote dentro de lo que cabe. Luego tenemos a Emma Watson que hace de Ila, una niña a la que adoptan tras rescatarla de lo que queda tras un ataque a un poblado. Ray Winstone interpreta al malo de turno, un tal Tubal-cain. Y por último destacaré a Anthony Hopkins como Matusalén, un papel que le viene de perlas.
Un reparto bastante sólido y quizás la mejor razón para ver esta película, por no decir la única. Personalmente no me molesta el hecho de que sea una historia sacada de la biblia, al fin y al cabo es solo una historia y aunque algunos se han empeñado en buscar paralelismos con cosas que sucedieron realmente en la antigüedad, yo creo que son sólo una serie de lecciones morales, en este caso es toda una historia de superación y convicción personal.
Pero no quiero dispersarme demasiado, lo que menos me ha gustado ha sido la inclusión de lo guardianes de piedra, una especie de seres mitológicos. Si bien todo gira en torno a algo fantástico, porque un arca que contiene una pareja de cada especie animal de por sí es poco creíble, estos seres están fuera de lugar y son usados como una forma de ganar tiempo entre que los malos preparan su ejército y Noé construye el arca, poco más en realidad.
Podría haber sido enfocada como una historia menos dramática, la verdad es que hasta prácticamente el final no paran de sucederles calamidades a la familia ésta, cuyo padre es el personaje más pesimista (aunque acierte) que he visto en mucho tiempo.
Sin entrar en temas religiosos es una película que no me convence, en líneas generales. Tiene alguna escena de acción, pero son muy puntuales y dado que dura 2 horas saben a poco. El drama llega a ser cansino, las visiones y las señales de dios quedan bien como excusa pero también es verdad que las interpretan a su manera. Se me hace raro criticar tanto a Aronofsky pero esta vez siento decir que no me ha acabado de gustar como ha dejado esta película, en general.
No hay comentarios:
Publicar un comentario