Antes de ponerme con las películas más recientes quería hacer una pequeña parada en este título para quitármelo de una vez de encima y así rematar el tema Guinea Pig, que ya hace demasiado que lo dejé colgando.
A un señor le cortan la lengua y le encierran en una habitación acolchada. Allí le dan una comida asquerosa. Luego le sacan y un señor grandote se dedica a darle puñetazos en la cara hasta quedar inconsciente. A partir de ahí cada día le propician un tipo de tortura diferente. De repente aparece un papel a su lado y descubre que es de la chica de la habitación de al lado, a quien también están torturando.
Es la segunda de esta serie de películas, las otras tres son "American Guinea Pig: Bouquet of Guts and Gore" (2014), "American Guinea Pig: Sacrifice" (2017) y "American Guinea Pig: The Song of Solomon" (2017).
En todo caso no recuerdo que me gustase ninguna de ellas y si la veo es únicamente por tener la entrada y por decir que las he visto todas.
Se nota mucho que tanto la lengua como lo que tiene luego en la boca para simular que se la han cortado es falso.
Además es en blanco y negro, lo cual debería ayudar a camuflar mejor ese tipo de cosas, pero no funciona.
Creo que trataron de imitar "ギニーピッグ 悪魔の実験" (1985). Y a su lado se queda cortísima. 30 años después siguen sin ni siquiera igualar los efectos especiales de dicha película.
Pero vamos, eso es algo que ya tenía previsto antes de verla, lo que no me gusta es que los "castigos" sean tan infantiles y duren apenas unos segundos. No se recrean, no vemos al tipo sufrir, no hace nada original ni interesante para los que hemos consumido este tipo de productos durante décadas.
Y me imagino que vieron las películas japonesas originales, de ahí que copien el título, pero parece que no hayan aprendido nada de nada.
Como alguien que ha tenido que estar sentado durante horas en una silla de dentista, que te arranquen una muela de manera limpia no es, ni de lejos, lo más doloroso que te pueden hacer. Si se rompe es otro cantar.
Un tipo que no sabe optimizar los pocos recursos de los que dispone merece que le torturen un ratito más.
Más o menos a mitad película conocemos a su vecina, una chica muy agradable sin un pelo de tonta que parece sacada de un videoclip de Marilyn Manson.
Intentan mostrar de manera realista las diferentes operaciones, que dicho sea de paso no sé muy bien qué sentido tienen más allá de putear a los cautivos, pero sin fijarme demasiado se nota mucho que es todo falso. Por ejemplo, no se ve en ningún momento un plano donde se pueda apreciar a la vez la cara del tipo y los lugares donde van haciendo las incisiones y demás.
No hay una historia, ni una explicación de nada, simplemente van cogiendo al hombre y a la mujer y les van destrozando el cuerpo poco a poco. Es una tortura agónica que dura un tiempo indeterminado, pero definitivamente no es poco. Y como buena película estadounidense no puede faltar una escena en la que se rebelan.
Cuando por fin se conocen los dos prisioneros la imagen cobra color. Es entonces cuando descubrimos que en realidad los maquillajes de las heridas y demás están bastante logrados. Es la única parte decente de la película. Terminan completamente cubiertos de sangre.
Y al final volvemos al blanco y negro para ver como le cortan la lengua al siguiente "paciente".
Durante los créditos finales hay otra escena más de un hombre y una mujer que regresan a sus respectivas casas y asesinan a alguien con un cuchillo (a su esposa y a su hija él, a su madre ella). Son los tipos a los que "castigan" durante toda la película. Es una manera de darle sentido a todo ello.
Si lo que pretenden es hacer "justicia" a base de torturarles no parece que sea algo efectivo, pues todo sucede de manera secreta en un sitio aislado. Aparte que no tengo muy claro si al final la parejita muere, pero dada la cantidad de sangre que pierden bien podría ser.
En todo caso con esto cierro por fin esta saga. No sé si ha salido algún título posteriormente que quizás esté "relacionado", pero vamos, que me da igual. Si por alguna casualidad doy con otra ya la veré, pero no pienso buscar.
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