Otra de "tiros".
Tras terminar la guerra civil el Coronel Cord McNally continúa en la búsqueda de unos traidores de su regimiento. Uno de los confederados le avisa para que vaya en su ayuda pero en medio de todo ello aparece una mujer que busca venganza.
Dirigida por Howard Hawks, fue su última película. Ya he comentado las también suyas "El Dorado" (1967) y "Red Line 7000" (1965).
Protagonizada por John Wayne (Coronel Cord McNally), cuesta elegir títulos cuando se trata de un actor con una filmografía tan amplia con algunas de las películas más influyentes, casi todo westerns eso sí.
Del resto del reparto destaca Jorge Rivero (Capitán Pierre Cardona), le vi en "El niño y el tiburón" (1978). Jennifer O'Neill (Shasta Delaney), salió en "Scanners" (1981). Jack Elam (Phillips), salió en "The Cannonball Run" (1981).
Es una película que tiene de todo. Aventuras, comedia, acción, en dosis altas además. Aunque su mayor peculiaridad es la escena del dentista porque fue usada en "El Informal" en numerosas ocasiones doblada en plan cómico por Florentino Fernández.
A John Wayne le pareció que Jack Elam le robó algunas de sus escenas en esta película y por ello no permitió que saliese en "The Train Robbers" (1973). No sé si robarle pero desde luego su presencia se siente en todo momento, a pesar de repetirse más que el ajo.
Por su parte al terminarla Howard Hawks no creyó que fuese una gran película aunque le echó la culpa a John Wayne. Los críticos dijeron que estaba demasiado viejo y gordo como para hacer de soldado.
Cortaron el papel de Jennifer O'Neill en la parte final en favor de Sherry Lansing (Amelita). En realidad no queda mal tal y como lo dejaron pero queda un poco raro que el personaje de O'Neill no reaparezca.
Es considerada un remake de "Rio Bravo" (1959), también de Howard Hawks. Aunque allí Wayne interpreta al personaje que aquí hace Jack Elam.
En mi opinión es una película muy entretenida que si bien guarda muchas similitudes con otros westerns de la época creo que llegó un punto en el género en el que tampoco se podía pedir demasiado. Las actuaciones de los secundarios son cuestionables pero incluso eso resulta divertido en cierta manera, a mí me vale.
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